Aunque los troncos más gruesos han sido retirados del atrio, supuestamente para usarlos como leña, las ramas más pequeñas han sido amontonadas en el entorno. Giráldez entiende que a la espera de que sea la brigada municipal la que se haga cargo de ellas, aunque avisa que tampoco para ello hay petición oficial y que espera que los representantes de la Iglesia contacten con el Concello para formalizarlo. Entiende que, al menos, debe cuidarse la cortesía institucional.