El líder opositor venezolano Henrique Capriles dijo ayer, después de haber votado en las elecciones al Parlamento, que los venezolanos no quieren que se genere un "estallido social" una vez se conozca el resultado final de los comicios, donde se aventuraba una victoria de la oposición al régimen chavista, aunque al cierre de esta edición no había comenzado el escrutinio.

"Los venezolanos no queremos un estallido social, no queremos una guerra. Los venezolanos queremos que triunfe nuestro país, nuestra Venezuela", dijo Capriles a un centenar de periodistas locales e internacionales que se concentraron en su centro de votación. El también gobernador del estado Miranda y dos veces candidato presidencial aseguró que en el país se ha llevado a cabo el proceso electoral de manera "muy tranquila", a pesar, dijo, de las cosas que la oposición venezolana "debe sortear". "Siempre es una lucha desigual, siempre es un abuso" por parte del Gobierno venezolano, señaló Capriles. El dirigente opositor advirtió de que en los medios de comunicación del país "no se le ha brindado un solo minuto a la oposición en sus transmisiones" durante el proceso electoral.

La alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) denunció ayer que existe una "guerra sucia por parte de laboratorios oficialistas" en redes sociales y a través de volantes durante el desarrollo de las elecciones parlamentarias.

Las elecciones legislativas venezolanas, que han generado gran expectación nacional e internacional, avanzaron ayer sin incidentes y una elevada participación, mientras la oposición denunciaba que la cobertura de televisión favorecía al Gobierno. El presidente venezolano, Nicolás Maduro, uno de los más rezagados en ejercer su derecho al voto, lo hizo por la tarde y llamó a sus conciudadanos a volcarse a los recintos electorales. "Que nadie se quede sin votar, que nadie se quede en su casa. En familia, en cambote (en masa), abrazados, a pie, en bicicleta, en moto, en burro, como sea a votar, votar y votar", instó Maduro.

El expresidente del Gobierno de España José Luis Rodríguez Zapatero se reunió el sábado con Maduro, aunque quiso matizar que este encuentro no supone un apoyo al chavismo. Zapatero afirmó que quiere que en Venezuela haya "más diálogo y comprensión y menos prejuicios", mensaje que trasladó al dirigente del país en la reunión que ambos han mantenido en el Palacio de Miraflores, en Caracas. "Mi deseo es que en Venezuela y en el mundo exista más diálogo, cercanía, comprensión y menos prejuicios", ha asegurado el expresidente español. Zapatero forma parte del equipo de acompañantes internacionales invitados por el Consejo Nacional Electoral.

Extensión del cierre

Por otra parte, el presidente del Parlamento venezolano, Diosdado Cabello, pidió ayer la expulsión de Venezuela de los expresidentes Jorge Quiroga (Bolivia), Andrés Pastrana (Colombia) y Alberto La Calle (Uruguay) después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) les retirara las credenciales de "acompañantes políticos". La autoridad electoral anuló esas credenciales a los expresidentes después de que éstos pidieran que cerrasen los centros de votación a las 18.00 hora local (22.30 GMT), pese a que la norma electoral venezolana lo prohíbe en casos de que aún existan electores en fila dispuestos a sufragar. Finalmente, el Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE) extendió el horario de cierre hasta las 19.00 hora local (23.30 GMT) al considerar que se mantenían en cola electores dispuestos a sufragar.