La explosión del negocio de las apuestas prosigue en Galicia. Un año después de que la Xunta elevase de 2.000 a 3.600 el tope legal de terminales instaladas en bares y cafeterías a petición del sector, el límite ya casi se ha agotado, pues apenas restan 85 para alcanzar esa cifra. El Ejecutivo condiciona cualquier nueva ampliación de permisos a agotar esos permisos y "a ver la evolución" del negocio, mientras que uno de los mayores operadores en la comunidad, Luckia -del grupo Egasa- considera suficiente el actual mapa "a corto plazo", según su presidente, José González, alegando el ratio por población.
Los locales de hostelería gallegos cuentan en la actualidad con 3.515 máquinas para realizar apuestas deportivas, aunque desde el año pasado Galicia permite jugar dinero a cualquier tipo de evento, como quién ganará Eurovisión o los premios Goya que esta noche se entregan. Se trata de un 75% más de los dos millares que, como máximo, podían estar colocadas en bares y cafeterías al cierre de 2016, un mes antes de que entrase en vigor el nuevo tope de 3.600. El aumento es del 49% en ocho meses desde las 2.362 que Vicepresidencia tenía registradas en abril pasado.
Este despegue del negocio de las apuestas se produce tras la regulación del sector en 2012 y la concesión de las primeras licencias en febrero del año siguiente, y contrasta con las quejas de las asociaciones de ayuda contra la ludopatía, que criticaban el impacto especialmente preocupante sobre los más jóvenes. Dos de las principales asociaciones de Galicia cifraban el año pasado las consultas de padres preocupados por estas prácticas de sus hijos en 80 mensuales, 20 de las cuales correspondían a menores de edad, que burlaban la prohibición legal de apostar.
Desde su regulación, la Xunta ha ampliado el negocio de los seis operadores con licencia en la comunidad por días vías: mediante la apertura de las apuestas a cualquier evento extradeportivo y elevando de 2.000 a 3.600 las terminales permitidas en locales de hostelería, ambas decisiones aplicadas el año pasado. Eso sí, la regulación vincula la necesidad de contar con una tienda específica de apuestas por cada centenar de permisos para colocar una máquina en bares y cafeterías. De hecho, Galicia cuanta con 35 tiendas autorizadas en funcionamiento actualmente, según Vicepresidencia. A ellas se unen otros 94 espacios de apuestas en bingos, casinos, salones y recintos deportivos.
En la actualidad, A Coruña lidera el reparto de estas terminales en hostelería -de aspecto similar al de las tradicionales tragaperras - con 1.321, seguida de Pontevedra, con 1.200, Ourense (550) y Lugo (440). Las ciudades copan casi el 40% del total y Vigo se sitúa, con diferencia, como la que mayor número de terminales acoge, con 362, por delante de A Coruña (308), Ourense (239), Lugo (183), Santiago (116), Pontevedra (97) y Ferrol (70).
En Pontevedra también destacan en la clasificación Vilagarcía (75), A Estrada (34), Lalín (33), Ponteareas y O Porriño (32 cada una), Marín (30), Sanxenxo 29), Tui (24), Baiona (21) y Redondela (18).
