La izquierda rupturista catalana se unirá en un nuevo partido impulsado por los "comúns" de Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, tras el acuerdo sellado ayer con Podemos. La formación morada rechazó la alianza hasta que se aceptasen unas condiciones similares a las que permitieron el pacto electoral en Galicia para constituir En Marea, si bien existe una gran diferencia. Podemos decide participar en la nueva fuerza, mientras en Galicia se limitó a establecer una unidad electoral en los comicios de septiembre.

Las condiciones de Podemos finalmente aceptadas son la participación de su censo sin necesidad de inscribirse en el del nuevo partido, un código ético común y primarias abiertas para la dirección, similares a las que rigieron la participación morada en la consulta para elaborar las candidaturas electorales gallegas.