Con cuatro minutos de retraso, según el reloj de la estación de ferrocarril San Cristóbal, hizo su entrada ayer en A Coruña el tren de alta velocidad procedente de Ourense de las 19.00 horas. Cada viajero que se apeaba en el andar número seis de la estación reflejaba en su cara la satisfacción de haber llegado antes que nunca a su destino.

Si bien con las líneas tradicionales el trayecto entre la ciudad de As Burgas y A Coruña superaba las dos horas, los usuarios del AVE pudieron realizar ayer este desplazamiento en la mitad de tiempo, igual que quienes subieron al tren Avant en Santiago. Un recorrido de apenas 65 kilómetros que sin línea de alta velocidad se tardaba 50 minutos en realizar. Ahora se logra en 28 minutos.

Y este ahorro de tiempo es la cualidad que más convence a los usuarios, que en la tarde de ayer eran en su mayoría estudiantes universitarios procedentes de Ourense y de la capital gallega que viajan a la ciudad coruñesa para cursar sus estudios y que se ven obligados cada semana a realizar este trayecto en dos ocasiones.

Cargados con sus maletas de ruedas, mochilas y carpetas, las características de la primera línea de alta velocidad de Galicia, que llega a la comunidad con una década de retraso, convencen a los usuarios pero no tanto su precio, aunque muchos aseguraban ayer que asumían este incremento en el coste del billete con gusto a cambio de las comodidades que ofrece el nuevo Avant.

Este es el caso de Carla Arce, que cursa la carrera de Derecho en la Universidade da Coruña y que cada semana regresa a su casa en Ourense para disfrutar del fin de semana. "Hay muchísima diferencia ya que el trayecto que antes tardaba dos horas y media en hacer ahora me lleva una, por lo que me compensa el incremento de precio", puntualiza, al tiempo que confiesa que ya no volverá a utilizar un tren que no sea una línea de alta velocidad para sus desplazamientos entre A Coruña y su ciudad natal. "Además, hay bonos para estudiantes por lo que el billete saldrá más barato", recuerda.

Más crítico en este sentido se muestra el Sindicato Ferroviario de Galicia de la Confederación General del Trabajo (CGT), que denuncia que el tren Avant "tiene los precios más altos de España a pesar de circular a menos velocidad" que en otros lugares del ámbito nacional. El sindicato critica que las tarifas en Galicia del AVE sean "un 18% más caras" y considera "especialmente abusivos" los precios del trayecto entre A Coruña y Santiago puesto que pasa de 6,05 euros a 10,50 euros "para una mejora de apenas ocho minutos". Tampoco se muestra de acuerdo con la supresión de l tren de Media Distancia entre A Coruña y Santiago de las 8.28 horas, que unía ambas ciudades "en plena hora punta", recuerda. La CGT explica que Renfe ha sustituido este tren por un Avant, por lo que los viajeros que tengan que llegar a Santiago a las 09.00 horas sufrirán un incremento de un "73% en el billete sencillo por un ahorro de cinco minutos". Pero ayer era el día del estreno del AVE en Galicia y los viajeros estaban dispuestos a rascarse el bolsillo. Menos confianza mostraban en la continuidad de esta línea con la Meseta, ya que la mayoría coincidían en destacar que pasarán muchos años hasta que sea una realidad.