El centro de Vigo de PSA Peugeot Citroën es el único del grupo en Europa con nuevos lanzamientos en marcha que detendrá su actividad por completo la próxima semana, cuando se ha programado una parada conjunta de las plantas del Viejo Continente para ajustar stock de vehículos y componentes, según ha podido saber FARO. La fábrica de Sochaux, que acaba de lanzar al mercado el Peugeot 308, la de Mulhouse (con el nuevo Peugeot 2008), la de Poissy (con el DS3, DS3 Cabrio y C3) y la de SevelNord (que está preparando el lanzamiento de un vehículo comercial con el grupo Toyota, el proyecto K-zéro) mantendrían su actividad en algunas líneas.

El centro de Balaídos, sin embargo, que en junio lanzó la nueva generación del Citroën C4 Picasso y un mes después hizo lo mismo con el Grand C4 Picasso, parará del lunes 28 al jueves 31 de octubre (el viernes 1 de noviembre ya no tenía previsto trabajar al ser festivo nacional), lo que obligará también a sus proveedores directos a detener su actividad (sobre todo a los que le suministran componentes en modo sincro, como Faurecia Escapes, Faurecia Asientos de Galicia, Plastic Omnium o Antolín).

Plan social

La corporación, que hoy presenta sus resultados económicos del tercer trimestre del año, ya cuenta con la mayoría sindical necesaria para poner en marcha el nuevo plan social que afectará a sus plantas francesas y que supondrá en la práctica la congelación de los salarios en los próximos años para mejorar su competitividad. Este plan persigue un ahorro anual de alrededor de 100 millones de euros.

El documento contempla la congelación de salarios en 2014 y una evolución moderada en 2015 y 2016, en función de la recuperación de la empresa y la inflación. También incluye sustituir a unos 3.000 trabajadores de edad avanzada por jóvenes que entrarán en régimen de alternancia (combinando la formación con las prácticas). La prima por las horas extraordinarias pasará del 45% al 25% y los días libres solo se pagarán en casos excepcionales. A cambio, PSA se compromete a fabricar en Francia un millón de coches en 2016 y a mantener la actividad de las plantas en el país más allá de ese año.