Una familia de Ponteareas tuvo que ser desalojada, ayer de madrugada, de su vivienda en la Praza Maior después de que comenzara a arder el edificio contiguo abandonado.

Los bomberos de Ponteareas recibieron el aviso, a las 4.55 horas, y acudieron con dos camiones y un todoterreno. Comenzaron a sofocar el incendio por la fachada ya que el edificio desalojado y el incendiado están conectados por la parte delantera. A continuación, entraron por la parte trasera al interior para continuar sofocando las llamas. El incendio pudo darse por controlado a las 6.40 horas y la familia desalojada pudo regresar a su casa a las 7.35 horas, cuando el fuego se extinguió totalmente.

Este inmueble en estado ruinoso solía ser frecuentado por indigentes. Casualmente, este mismo martes la empresa constructora a la que pertenece había comenzado a tapiar el edificio. Los vecinos aseguran que no solo se adentraban en él personas sin hogar, si no también jóvenes e incluso niños para jugar.

Como origen del incendio no se descarta un cigarro mal apagado o quizás una hoguera que podrían haber hecho para calentarse ya que, según los bomberos, a pesar de estar sellada la parte delantera, era posible acceder por la parte de atrás.

Según informaron, ayer, los bomberos ponteareanos; las mantas, colchones y papeles almacenados en el interior favorecieron la extensión de las llamas.

Además, al ser el interior de madera vieja y apolillada, las llamas se propagaron con facilidad hasta destruir por completo dos de las habitaciones de la planta baja y dejar bastante dañada la totalidad del edificio de tres plantas.

Además de los bomberos ponteareanos, hasta el lugar también se desplazó la Policía Local, la Guardia Civil y el 061, movilizado por precaución.

Durante toda la mañana, los bomberos continuaron refrigerando el edificio y removiendo los escombros para descartar que algún indigente pudiese haber fallecido calcinado en el interior del edificio.

Después del incendio, la empresa propietaria valló el inmueble e inició los trabajos para su demolición.

Por su parte, el concejal de Seguridad Ciudadana, Jesús Antonio Fernández Suárez, que siguió de cerca los labores de extinción destacó "la rápida y eficaz labor del servicio de bomberos que impidió que el incendio alcanzara mayores dimensiones y ocasionase daños difícilmente cuantificables".