El Celta regresó ayer a los entrenamientos tras descansar la víspera con la duda de si Juan Carlos Unzué podrá disponer de Hugo Mallo para el importante compromiso liguero del próximo domingo ante el Espanyol, que el equipo celeste afronta decidido a retomar la senda del triunfo tras caer en la última jornada ante el Alavés en Mendizorroza.

La baja del capitán celeste se dejó sentir en este último partido, que Mallo se perdió debido a un traumatismo en el primer dedo del pie derecho del que sigue recuperándose.

Los servicios médicos del Celta ha descartado, tras practicar diversas radiografías, la existencia de una fractura en el dedo dañado, pero detallan que el traumatismo directo en el dedo citado genera un intenso dolor que limita el trabajo del jugador. Mallo, de hecho, inició ayer el entrenamiento con el grupo, pero solo pudo completar la primera parte con el resto de sus compañeros.

Con estas premisas su participación el domingo en el duelo ante el conjunto que dirige Quique Sánchez Flores está en el aire. Su concurso no está descartado, pero va a depender de cómo evolucione la lesión en los próximos días.

La posible ausencia de Mallo, que hasta la pasada jornada tan solo se había perdido dos encuentros de Liga, ante Las Palmas y el Villarreal, supone todo un contratiempo para Juan Carlos Unzué que, en el último partido contra el Deportivo Alavés, no dio con la tecla para suplir al jugador.

Las opciones para sustituir al capitán como lateral derecho serán las mismas que el técnico empleó, con distinto rendimiento, en el duelo contra los vitorianos.

Juan Carlos Unzué puede optar por cambiar de banda a Jonny Castro, que regresaría a su posición natural, y repetir con el eslovaco Robert Mazan en el costado izquierdo o bien mantener al lateral de Matamá en la posición en que ha venido jugando en los últimos años y retrasar a Daniel Wass al costado derecho.

Ambas opciones presentan ventajas e inconvenientes. En el primer caso, el técnico céltico dispondría de dos jugadores específicos para los carriles y contaría con Wass en medio campo, más pendiente del área rival que de la propia. La falta de adaptación del eslovaco, poco profundo por su banda en Mendizorroza, y la poca costumbre de Jonny en el flanco izquierdo podrían restar, sin embargo, mordiente al equipo, como ocurrió el pasado domingo contra el Deportivo Alavés.

La opción de Wass resta potencial ofensivo al Celta pero ha acreditado su solvencia e los tres partidos en los que el danés ha actuado como lateral derecho por lesión o sanción de Mallo. El danés jugó con buenas prestaciones en esta posición en la victoria ante Las Palmas en el estadio Gran Canaria, no desentonó en la derrota mínima ante el Villarreal en Balaídos que el marinense se perdió por sanción y destacó en el valioso empate obtenido por los de Unzué en el Camp Nou, donde Mallo jugó a pierna cambiada como lateral izquierdo.

La mejoría experimentada por el equipo en Mendizorroza cuando Unzué situó a Jonny en banda izquierda y retrasó a Wass a la defensa hace pensar que ésta podría ser la opción más factible para el domingo. Fiel a su costumbre, sin embargo, el entrenador celeste no ofrece pista alguna sobre sus planes para el compromiso contra los pericos.