Juan Carlos Unzué afronta el primer asalto de los octavos de final de la Copa del Rey con el convencimiento de superar la eliminatoria y espera obtener esta tarde en Balaídos un "resultado favorable" que le permita llegar la próxima semana al Camp Nou con opciones de superar el cruce. El técnico celeste reconoce que un gran paso para ello sería que su equipo no recibiese goles esta tarde, si bien matiza que su principal objetivo es ganar a los de Valverde y defender esta ventaja dentro de siete días en el coliseo azulgrana, donde el Celta ya consiguió empatar a dos goles hace un mes en la Liga.
"Ojalá que consigamos dejar nuestra puerta a cero porque esto nos daría muchas opciones, pero también es cierto que no es fácil. Nuestra forma de jugar no varía demasiado en casa o fuera, con lo cual nuestra idea es lograr el resultado más favorable posible", apuntó el preparador navarro, que precisó: "Conseguir que la puerta esté a cero sería fantástico y, si podemos hacer goles, pues mucho mejor. Repito que no será fácil y, al final, hay que tratar de ganar el partido, de ir por delante en el marcador, dominar el partido de vuelta y que tengamos realmente opciones. Como lo que va a ocurrir aquí o va a ocurrir allí no va a ser muy diferente, si estás por delante, siempre vas a tener posibilidades".
El buen partido firmado por el Celta hace un mes en el Camp Nou es, en opinión de Unzué, una referencia válida de cómo hacer daño al coloso azulgrana. "En el Camp Nou intentamos defendernos de la mejor manera posible. Hicimos una presión alta para que ellos no se sintiesen cómodos en su inicio de juego y algunos momentos lo conseguimos, sobre todo cuando recuperamos la pelota cerca de su área. El Barcelona te exige defenderte cerca de tu área y vamos a intentar hacer las dos fases de forma más efectiva: apretar arriba y robar con poco espacio para llegar a la portería rival pero llegar desde nuestro campo también es una de nuestras virtudes. Espero que consigamos ponerles en problemas con esa presión alta para iniciar", observó.
La ausencia de Lionel Messi, Luis Suárez y Andrés Iniesta, a quienes Ernesto Valverde ha dejado fuera de la convocatoria para el partido por decisión técnica, suponen un cierto alivio para Unzué, que no obstante destaca la dificultad de doblegar a una plantilla de tanta calidad como la del Barcelona con independencia de los hombres que salten al césped.
"Siempre que el rival no tenga a todos sus hombres es bueno para nosotros pero me sorprendería que no estén", indicó el preparador celeste a mediodía de ayer, antes de conocer las ausencias de los principales pesos pesados del ataque azulgrana. "No sé qué decisión tomará Valverde pero estoy preparado y cuento con que van a estar todos", dijo Unzué. "Y si no están, el Barcelona tiene una gran plantilla como para que su nivel no baje. Messi no es fácil de sustituir pero los que jueguen nos van a exigir el máximo nivel", remachó.
