El KRC Genk será el rival del Celta de Vigo en cuartos de final de la Europa League. El conjunto belga, que viene de eliminar al Astra Giurgiu y al Gent en las eliminatorias previas, es un equipo vertical, que busca siempre la portería contraria a costa de desatender ya suya propia. En la fase de grupos de la competición se enfrentó al Athletic Club, al que doblegó por 2-0 en Bélgica y con el que sucumbió 5-3 en San Mamés.

Su temporada está siendo de lo más irregular. Pese a su buena andadura europea, en la competición doméstica el equipo dirigido por el holandés Albert Stuivenberg no accedió a la fase final de la competición (los ocho primeros durante la fase regular acceden a una segunda liga en la que se decide el título.

Al Genk le puede pesar la pérdida de sus dos principales estrellas el pasado mercado de invierno. Onyinye Ndidi salió hacia el Leicester por más de 17 millones de euros y el jamaicano Leon Bailey fue fichado por el Bayer Leverkusen a cambio de 13 millones. Sin duda, dos bajas que restan potencial a la escuadra belga.

La estrella

Pozuelo. El centrocampista zurdo se ha erigido como una de las principales figuras del equipo. El técnico jugador se ha ganado a su afición con actuaciones deslumbrantes como la exhibición de fútbol que dio en el partido de ida de los octavos de final ante el Gent, donde los suyos golearon por 2-5. En un club que no tiene grandes figuras, el sevillano puede marcar la diferencia con sus asistencias y llegadas desde segunda línea.

El goleador

Samatta. El delantero tanzano está haciendo olvidar a Karelis, lesionado para lo que resta de temporada. Esta campaña suma 18 goles en todas las competiciones, lo que le convierten en la gran amenaza del cuadro belga. Su mediana estatura (1,80) no le impide ser un buen rematador de cabeza, aunque su principal arma es su gran disparo con ambas piernas.

Viejos conocidos

Ryan. El portero australiano regresó a Bélgica tras no gozar de oportunidades en el Valencia. Desde su vuelta lo ha jugado todo con el Genk, convirtiéndose en uno de los pilares defensivos del equipo de Stuivenberg.

Naranjo. El exjugador del Celta no se enfrentará a los que fueron sus compañeros los primeros meses de esta temporada al no estar inscrito en la Europa League.

La perla

Malinovsky. El centrocampista ucraniano, cedido por el Shakhtar Donetsk, tratará de vengar la eliminación del conjunto del este de Europa. Goza de un gran golpeo a balón parado y por sus pies pasa buena parte del juego del equipo belga. Tras llegar en enero de 2016, se ha hecho un fijo en el once.