La escalada que experimenta la cifra de desempleados es algo que viene a confirmar los peores temores que tienen los sindicatos: que no existe ningún tipo de recuperación, como se apunta desde el Gobierno del Estado. El responsable de la Confederación Intersindical Galega (CIG), Xoán Xosé Bouzas "Tupi", apuntaba ayer que "estos datos confirman el peor de los temores, que no caminamos hacia una recuperación sino que el número de parados continúa incrementándose sin que se diseñen políticas adecuadas". El sector en el que más se ha notado el golpe del desempleo es el de los servicios "por el fin de la campaña de diciembre en municipios turísticos como O Grove y Sanxenxo, lo que significa que las pocas opciones laborales que existen son eventuales".

Es cierto, reconoce Bouzas, que la tasa interanual de desempleo ha caído un 5%, pero para el sindicalista "no ha sido por la creación de nuevos puestos de trabajo sino porque muchas personas han optado por la emigración, mientras otros ya desisten del INEM y de cotizar a la Seguridad Social porque no les da ningún tipo de opción para encontrar un acomodo laboral".

Precisamente el sindicalista hace hincapié en la "desmoralización y desilusión que se ha instalado entre las personas que se encuentran en situación de desempleo, mientras que el resto sufren una gran inseguridad laboral debido a los decretos aprobados por el Gobierno".

El sindicato nacionalista entiende que es imposible afrontar esta situación si no se aplican medidas económicas de carácter social, "como planteamos en una Iniciativa Legislativa Popular, porque en estos momentos, caminamos hacia un empobrecimiento de la clase trabajadora".