Así está el tablón de anuncios de pisos en alquiler en Santiago, vacío. En las inmobiliarias, cada vez que cuelgan una nueva vivienda, vuela. La oferta no es suficiente para la alta demanda. Hay apenas 150 pisos en alquiler para una ciudad de 100.000 habitantes. Santiago es una ciudad universitaria y esto complica más el mercado. Por eso, muchos estudiantes optan por irse a vivir a las afueras. Según datos municipales, en los últimos cinco años se ha incrementado en un 26% el precio del alquiler en Compostela. Una de las causas de esta escasez es el aumento de pisos turísticos. Superan los 800, cinco veces más que los destinados a alquiler tradicional. Viviendas vacías, pocas promociones y proliferación de pisos turísticos, un cóctel explosivo que está haciendo que alquilar en Santiago sea casi misión imposible.
