En la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra se suspendió finalmente en la mañana de ayer el juicio contra 3 acusados de participar en una gran descarga de cocaína, trasladada a Galicia desde Colombia en un mercante. Dos de los policías que han de declarar en el proceso se encuentran en estos momentos de vacaciones y la Fiscalía pidió un aplazamiento hasta la reincorporación de los agentes para que puedan testificar en la vista.
Así, el nuevo juicio ha sido fijado para los días 27, 28 y 29 del próximo mes de octubre. Los procesados están acusados de, en relación y coordinación con terceros cuya identidad no ha podido ser determinada, organizarse entre los meses de abril y mayo de 2017 para hacer llegar a Galicia una importante partida de cocaína.
La Fiscalía acusa a los procesados de hacer uso de una embarcación propia para cargar la droga. La sustancia fue transportada desde Colombia a bordo de un buque mercante, que fue interceptado por los agentes a veinte millas de las costas españolas.
Para uno de los investigados en esta causa la Fiscalía pide 10 años de cárcel y dos multas de 1,9 millones; y, para cada uno de los otros dos procesados, 13,5 años de prisión y el abono de dos multas de 5 millones cada una.
Los acusados son un ciudadano de nacionalidad colombiana y dos gallegos, en concreto un vecino de Valga y otro de Sanxenxo. El primero de ellos fue interceptado en 2017 después de que un mercante con bandera de Liberia que navegaba procedente de Cartagena de Indias y con destino al Puerto de Vigo diese una alerta de polizón. Le fueron incautados en ese momento 52 ladrillos de cocaína, según refleja el Ministerio Fiscal en su escrito de acusación.
Tras hacerse pasar por este polizón, las fuerzas de seguridad españolas localizaron a los otros dos procesados, a los que el fiscal no solo acusa de estar relacionados con esta partida sino de dedicarse en general a la distribución lucrativa de estupefacientes. En el caso concreto del vecino de Sanxenxo, pide que se aplique la circunstancia agravante de reincidencia, dado que ya fue condenado a prisión por un anterior delito contra la salud pública.
A los tres se los acusa de un delito contra la salud pública en la modalidad de sustancias que causan grave daño a la salud, concurriendo en este caso el subtipo superagravado de extraordinaria gravedad en atención a la utilización de embarcaciones, cometido en el seno de una organización criminal de narcotráfico.
