La Guardia Civil desarticuló una trama de tráfico de armas que se dedicaba a transformar armas detonadoras para efectuar fuego real, en una operación que se llevó a cabo en una veintena de provincias españolas y que supuso la detención de 26 personas, una de ellas en Carral (A Coruña)

La "Operación Balín", desarrollada en dos fases, se saldó también con 17 investigados, así como con 126 armas de fuego y 6.000 cartuchos metálicos intervenidos. La investigación comenzó en Sevilla hace un año, cuando se detectaron varios anuncios en internet en los que "bajo diferentes subterfugios" se ofertaba la venta de armas detonadoras transformadas para efectuar fuego real, además de munición de proyectil para las mismas.

La Guardia Civil descubrió que el autor de los anuncios era un vecino de Sevilla de 53 años. Y a partir de ahí hubo el resto de arrestos.