Ayer iba a ser juzgado en Vigo. Pero la vista se suspendió ya que el procedimiento se acumulará a otro que se sigue en un juzgado de Villarreal (Castellón), en el que aparece como uno de los supuestos integrantes de una organización criminal especializada en fraudes bancarios y a la que también se atribuye blanqueo de capitales. Se trata de un individuo de nacionalidad pakistaní que utilizó en la urbe olívica el modus operandi que la banda desplegó en otros puntos de España: manipular documentos de identificación de ciudadanos extranjeros para retirar dinero de bancos. En el caso de Vigo y su área, logró así 10.120 euros en poco más de una hora tras ir a cinco oficinas de Caixabank y otros 18.000 euros en sucursales del Banco Sabadell.

El juicio en Vigo estaba previsto ayer en el Juzgado de lo Penal número 1. La Fiscalía pedía 3 años de prisión y multa por eses dos fraudes. Pero la defensa del acusado expuso en la sala la existencia del procedimiento del juzgado de Villarreal, en donde ya se incluía una de las dos estafas bancarias que atribuyen al acusado en Vigo, la de Caixabank. Ante esta situación, la vista se suspendió al estimar la Fiscalía que el procedimiento debe acumularse al de Castellón, dado que ese se sigue por más delitos y se solicitan penas más graves no solo para el pakistaní detectado en la urbe olívica, sino también para otros presuntos miembros de la banda.

Esa organización había sido desarticulada en 2014 en el marco de la denominada operación Pankinter de la Guardia Civil desplegada en varios puntos de España y que se saldó con más de diez arrestos. Los investigados son individuos de nacionalidad pakistaní que suplantaban mediante la falsificación de documentos la identidad de compatriotas suyos para presentarse en sucursales bancarias donde éstos tenían cuentas corrientes y retirar elevadas cantidades de dinero.