Agentes de la Guardia Civil detuvieron a ocho personas en Lugo y Santiago que formaban parte de un grupo criminal que se dedicaba a cometer delitos contra el patrimonio, entre ellos estafas, hurtos y robos con fuerza. El modo de proceder era el mismo: un miembro del grupo se hacía pasar por un trabajador de una empresa de electricidad o gas y trataba de estafar al propietario de la vivienda por una supuesta revisión, mientras los demás accedían al inmueble forzando una puerta o ventana y se hacía con joyas o dinero en efectivo.

A los ocho detenidos se les imputa la comisión de 34 hechos delictivos en su mayoría contra el patrimonio, igualmente se les imputa por tres delitos de tenencia ilícita de armas de fuego.