Un cortocircuito posiblemente provocado por la tormenta que hubo en torno a las seis de la madrugada parece ser la causa del incendio registrado ayer en el Hotel Pazo de Santa Trega, en A Guarda. El fuego que se originó a primera hora de la mañana y que el dueño del establecimiento intentó sofocar sin éxito con un extintor calcinó la zona de recepción, mientras que otras estancias resultaron dañadas por el humo. El propietario fue trasladado al Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo por precaución ya que tenía síntomas de una leve intoxicación por humo y se encontraba en un estado de gran nerviosismo.

El incendio se declaró pasadas las ocho y media de la mañana. El establecimiento, ubicado en la cima del monte Santa Trega, estaba vacío, pero el dueño se trasladó de inmediato hasta allí alertado al sonar la alarma, creyendo en un primer momento que se trataba de un robo. Al llegar ya se topó con el fuego y su primera reacción fue la de coger un extintor para tratar de sofocar el incendio. Hasta el lugar se trasladó la Guardia Civil y ya seguidamente el GES de A Guarda, cuyos efectivos emplearon 40 minutos en apagar las llamas, que salían con gran virulencia por las ventanas. Los bomberos de Porriño colaboraron en las labores de refrigeración y ventilación del inmueble, que se prolongaron hasta las doce del mediodía.

La recepción resultó muy afectada, con muebles y documentación calcinados y las paredes y techos ennegrecidos. El humo se extendió a otras estancias, como la del restaurante y bar, y también llegó a la segunda planta. Fue necesario extremar las precauciones debido a la existencia de un depósito de propano de 10.000 litros, que finalmente no supuso mayores problemas ya que estaba en el exterior de las instalaciones.

La Guardia Civil investiga ahora las circunstancias en que se originó el incendio, aunque todo apunta a un cortocircuito en el cuadro eléctrico. El establecimiento fue construido en 1933 y remodelado en 1999, según se destaca en su página web.