Una mujer de 37 años fue ayer detenida en La Villa de Don Fadrique (Toledo) acusada de matar a su bebé, al que degolló en el altar de la capilla del cementerio, para después refugiarse en la iglesia del pueblo, a la que entró gritando que "tenía el demonio dentro".

Los hechos ocurrieron sobre las ocho de la mañana, cuando la detenida, Zaida, de nacionalidad española, acudió a casa de su madre a recoger a sus dos hijos, que se encontraban durmiendo, aunque solo se pudo llevar al bebé, ya que la abuela le impidió que se llevase a la hija mayor. A continuación, condujo su furgoneta hasta el cementerio municipal y degolló al bebé de tres meses, al parecer con un cuchillo de cocina, según indicó la Policía Local del municipio toledano.

Fuentes de la investigación han informado de que la detenida tiene antecedentes psiquiátricos. La madre de Zaida dijo posteriormente que no reconocía a su hija en el momento en el que fue detenida ni tampoco en los últimos meses y destacó que al preguntarle por qué había cometido el crimen, esta le respondió que "tenía que salvar el mundo".

Está casada con un hombre de origen colombiano, el padre de sus dos hijos, que trabaja como vendedor ambulante y que tiene otros dos hijos de un matrimonio anterior.

Uno de ellos, Stevenson, contó a Efe Televisión que la mujer sufría depresión postparto y "hablaba cosas incoherentes" antes del crimen. Ha explicado que no se había recuperado de la depresión postparto y que "hacía cosas raras" como encender velas negras. La detenida fue trasladada a un hospital y puesta a disposición judicial.