La Policía Nacional de Pontevedra, en la denominada "Operación Poesía", acaba de desarticular un activo punto negro de venta de estupefacientes que además tenía la particularidad de que muchos de los compradores eran menores. Los agentes sospechan que la actividad de venta de estupefacientes en este domicilio era tan intensa, que los adolescentes de la ciudad conocían el piso desde el que se distribuía la droga como "Telecosto", como si del reparto de pizza o bocadillos a domicilio se tratara. Entre las detenidas está una madre que utilizaba a su hija de 15 años para que pusiera en contacto a amigos de su misma edad con ella, la vendedora.

La desarticulación de este punto negro de venta de droga por parte de la Policía Nacional fue posible gracias a la colaboración vecinal y la información recabada por la Policía Local de Pontevedra. Fuentes vecinales trasladaron a los agentes municipales sus sospechas de que en un piso de la calle Rosalía de Castro se estaba vendiendo droga al menudeo. La Policía Local inició las pesquisas que desembocaron en la incautación de tres pequeñas cantidades de hachís y otra de éxtasis (MDMA) procedentes de otras tantas ventas. La Policía Local interceptó a los cuatro compradores, de los que tres resultaron ser menores de edad.

Los agentes pudieron determinar que el "modus operandi" que se utilizaba para la venta del estupefaciente consistía en que una menor de 15 años, hija de la arrendataria del piso, ponía en contacto a sus amigos con la madre o con un hermano mayor de edad al objeto de facilitarles el estupefaciente. Los compradores se dirigían así al piso investigado, en donde tras llamar por teléfono a los moradores, estos materializaban la transacción de estupefaciente en el portal o en el interior de la vivienda.

Los agentes de la Policía Local trasladaron estos datos a la Policía Nacional, siendo a partir de entonces cuando se hicieron cargo de la investigación los efectivos de la Comisaría. Sus averiguaciones permitieron que finalmente, el 28 de enero, se estableciese un dispositivo policial para localizar y detener a las tres personas investigadas, dándose la circunstancia de que se comprobó otra venta de hachís a tres menores que acudieron al lugar y que fueron interceptados también por los policías. De inmediato, los agentes procedieron a la detención de la madre, de 48 años, vecina de Pontevedra y con antecedentes policiales; a su hijo de 19, también vecino de la ciudad y con antecedentes y de la hija menor de 15 años. También fue arrestado el novio de esta, un menor de 17 años, que acababa de hacer la entrega de hachís a los tres menores que luego fue interceptada por la Policía.

Durante el registro de la vivienda se intervinieron pequeñas cantidades de hachís y éxtasis.