La Policía Nacional ha desarticulado una red internacional dedicada a cometer robos con fuerza en domicilios sin dejar rastro, en una operación que se ha desarrollado en Madrid y Sevilla y en la que se ha detenido a 26 personas. Los delincuentes accedían a los pisos mediante el procedimiento del "bumping" y el "impresioning" para obtener copias de las llaves sin tener que contar con la original ni forzar las cerraduras.