Veinticuatro años de cárcel. Esa es la pena a la que fue condenado el propietario de una empresa de granito situada en el polígono de Espíritu Santo, en Cambre (A Coruña), por violar en dos ocasiones y acosar a una de sus empleadas. El procesado, de 77 años, alegó durante la vista que la denunciante, de 32 años, era su amante. La Audiencia Provincial no creyó su versión y lo sentenció. El letrado del imputado recurrió la resolución ante el Tribunal Supremo, que acaba de confirmar la resolución del órgano de primera instancia.

La víctima relató en el juicio que el procesado, que acudió a la vista acompañado por su mujer y su hijo, la acosó casi desde el primer día que comenzó a trabajar en la empresa. "Aprovechaba cualquier excusa para acorralarme. La primera vez fue cuando estaba haciendo unas fotocopias, se acercó y me dio una palmada en el culo. Le recriminé su actitud, no dijo nada y se fue", contó la joven.