Rolando Q. F., el joven de 24 años de origen colombiano que permanece en A Lama acusado de descerrajar en 2010 un tiro en la cabeza a un compatriota suyo en la discoteca Río Latino de Pontevedra, se enfrenta a penas que casi alcanzan los 18 años de prisión.

En cuanto al fiscal, la petición de condena asciende a 12 años de prisión por la tentativa de asesinato y dos años y tres meses por la de tenencia ilícita de armas, mientras que la acusación particular, que ejerce el abogado Jorge Cubela Boullosa, incrementa su solicitud hasta los 14 años y 11 meses de prisión por el primero de los delitos y tres años más por la posesión del arma de fuego con la que supuestamente disparó a la víctima, pese a que la pistola nunca que se llegó a recuperar. Además, también solicitará que el acusado indemnice al herido con un millón de euros por las graves secuelas que padece.