El atraco a la sucursal de Caixa Galicia en A Cañiza que frustró una patrulla de la Guardia Civil de Covelo, en el que murió tiroteado el agente Miguel Jorge Piñeiro Lorenzo, de 38 años, y en el que resultó herido su compañero, el cabo Alonso José Riveiro Cabaleiro, de 32 años, fue perpetrado por un grupo violento formado por auténticos profesionales habituados a trabajar por toda Galicia. Todos sus integrantes, tanto los dos detenidos –José Ángel Martíns Mendoza y José Vilar Casal–, como los dos que permanecen huidos, cuentan con un largo historial delictivo y se formaron con las grandes bandas de atracadores asentadas en Vigo en los años 80.

El presunto cabecilla del grupo, el vigués José Ángel Martíns Mendoza, "El Peke", llevaba solo cinco meses en libertad tras cumplir 12 de los 21 años de prisión a los que fue condenado por el homicidio frustrado a dos agentes de la Policía Local en Vigo en 1998. Entonces fue detenido e ingresó en prisión provisional, abandonando la cárcel el pasado mes de marzo. Momento en el que, según fuentes próximas a la investigación, se habría puesto al frente de un nuevo grupo de atracadores.

Él y su hermano Luis Ramiro, ambos con un gran historial delictivo por robos bancarios a mano armada en ciudades de Ourense y Pontevedra, no dudaron en 1998 en utilizar una ametralladora y un revólver contra los dos agentes que trataban de identificarles en un bar de Vigo, donde levantaron sospechas por la bolsa que llevaban, al parecer llena de armas.

Ambos reconocieron en el juicio celebrado en la Audiencia de Pontevedra ser autores del atentado a tres policías, los dos de Vigo y otro de Redondela. La sala tuvo en cuenta los problemas de drogadicción de los hermanos y rebajó las peticiones iniciales de la Fiscalía. Así, Luis Ramiro fue condenado a 21 años de prisión y "El Peke" a casi 24 años como coautores de un homicidio frustrado al disparar contra un agente de la Policía Local de Vigo; de dos intentos de homicidio al tirotear a la Guardia Civil que los localizó, así como de los delitos de atentado a la autoridad, hurto y tenencia ilícita de armas. En poder de los hermanos Martíns se hallaron un fusil que se utilizó en un asalto blindado y una escopeta utilizada en un atraco bancario.

El otro detenido por el atraco frustrado de A Cañiza, José Vilar, que fue desarmado y detenido en el lugar del tiroteo por el cabo Alfonso José Riveiro en un forcejeo en el que ambos resultaron heridos de bala, aunque su estado no reviste gravedad, también pasó ocho años en prisión. En concreto, su último ingreso en la cárcel fue en enero de 2001 y abandonó la prisión pontevedresa de A Lama en abril de 2009, según fuentes de Instituciones Penitenciarias.

Con antecedentes por atracos bancarios, en marzo de 1997 fue detenido por la Guardia Civil en relación con el homicidio de Roberto I. Domínguez en la localidad morracense de Cangas.

Los dos detenidos por el atraco de A Cañiza, que podrían pasar a disposición del Juzgado de Ponteareas en las próximas horas, son viejos colegas y se conocen desde su juventud. También serían antiguos amigos de Martíns los otros dos integrantes del grupo a los que busca la Guardia Civil. De hecho, ambos han sido identificados, si bien de momento las fuerzas de seguridad no han conseguido dar con ellos.