Nuevo accidente mortal en las carreteras gallegas. Un vecino de Fornelos da Ribeira (Salvaterra de Miño), José Luis Portas Valea, de 28 años de edad y apodado "O Negro", perdió ayer la vida tras chocar su vehículo frontolateralmente contra otro coche en un tramo recto de la carretera de Ponteareas a Salvaterra, a tan sólo tres kilómetros de su casa.

El accidente, cuyas causas investiga la Guardia Civil de Tráfico, fue de tal aparatosidad que el coche que conducía el fallecido, un Volkswagen Golf, quedó convertido en un amasijo de hierros. Tras el siniestro se trasladaron al lugar de los hechos una ambulancia medicalizada del 061 y bomberos del parque comarcal de Porriño, que procedieron a excarcelar al conductor cuando todavía tenía constantes vitales. Pero antes de poder trasladarlo al hospital, el joven perdió la vida. El conductor del otro vehículo implicado en el choque, un Seat León, sufrió heridas graves: su coche resultó dañado en la puerta del conductor.

La trágica colisión tuvo lugar en torno a las 14.45 horas en el kilómetro 3 de la carretera PO-403, que une Salvaterra de Miño con Ponteareas, a la altura de la primera localidad y en un tramo recto. Según explicaron varias personas que estuvieron en el lugar de los hechos, el accidente de circulación pudo deberse a una velocidad inadecuada del coche que conducía el fallecido y a la pérdida de control de uno de los dos vehículos, que chocaron prácticamente de frente.

Sanitarios

La excarcelación del conductor de Salvaterra, añaden los testigos, no fue muy complicada y se prolongaría durante unos diez minutos desde la llegada del equipo. El joven estaba monitorizado y los facultativos vieron como poco a poco iba perdiendo las constantes vitales, posiblemente debido a las hemorragias internas que sufrió debido al fuerte impacto.

La joven víctima de este trágico siniestro, que trabajaba en ´Maquisurga´, un taller de maquinaria pesada, era muy conocido y querido en la comarca. El apodo lo recibió de su padre, también vecino de Fornelos. La carretera donde ocurrió la colisión, de carácter autonómico, fue concluida por la Xunta hace cinco años y tiene numerosas limitaciones.