Detienen a un hombre por el asesinato del canónigo emérito de la Catedral de Valencia

El arrestado es un varón con quien la víctima habría mantenido una relación de índole sexual | La autopsia confirma que Alfonso López Benito, de 80 años, murió asfixiado

Momento en el que sacan el cadáver del canónigo de su domicilio de Valencia. |   // ROBER SOLSONA

Momento en el que sacan el cadáver del canónigo de su domicilio de Valencia. | // ROBER SOLSONA / Teresa Domínguez

Teresa Domínguez

Agentes de la Policía Nacional detuvieron en la tarde del miércoles a un hombre de 40 años como presunto autor del homicidio del canónigo emérito de la Catedral de València Alfonso López Benito, de 80 años de edad, tal como adelantó en exclusiva “Levante-EMV”, del mismo grupo editorial que FARO, en su edición digital. El arresto se produjo apenas 24 horas después del hallazgo del cadáver el canónigo en su piso de la calle Avellanas, al lado del Arzobispado, en pleno centro histórico de Valencia, en una actuación fulgurante de la Policía Nacional, que resolvió el caso en un tiempo récord.

El arrestado es un varón con quien la víctima habría mantenido una relación de índole sexual, según confirmaron a “Levante-EMV” fuentes de toda solvencia, y que está acusado, además, de robo, ya que se llevó el teléfono móvil del sacerdote, desde el cual envió mensajes de WhatsApp haciéndose pasar por su víctima y diciendo que estaría unos días fuera, con la intención de retrasar el hallazgo del cadáver. El cuerpo fue encontrado el martes por la mañana, dentro de su cama, sin ropa y con señales evidentes de haber sido asfixiado.

El hombre arrestado, que es natural de un país sudamericano y que permanece en dependencias policiales, fue apresado por agentes del grupo de Homicidios siguiendo el rastro de ese teléfono móvil y la información aportada por personas del entorno de López Benito, que habrían ayudado a identificar al sospechoso gracias a que acudía con regularidad a la vivienda y llegaba a permanecer varios días en la casa.

De momento, no ha trascendido si el hombre ha reconocido su participación en la muerte del canónigo emérito tras ser arrestado.

Según la información recabada por “Levante-EMV”, el canónigo emérito de la Catedral de València solía reclutar a esos jóvenes en la calle, la mayoría de ellos entre aparcacoches del centro de la ciudad. Así se desprende del testimonio de personas próximas al sacerdote que han prestado declaración ante los investigadores del grupo de Homicidios y que conocían de primera mano las costumbres de Alfonso López Benito.

La costumbre de llevar chicos jóvenes a casa le había generado conflictos que incluso habían traspasado lo personal y habían provocado tensiones con parte del vecindario, sobre todo después de que la Policía Nacional y la Local tuvieran que acudir en varias ocasiones a la vivienda.

En una de ellas, ocurrida hace algo más de dos años, agentes de la Policía Nacional tuvieron que mediar entre él y el joven, en ese caso un chico rumano de poco más de 20 años tras una fuerte bronca generada por la desaparición del móvil del cura.

A raíz de esas quejas vecinales, el Arzobispado le había llamado en numerosas ocasiones la atención y le había instado a que dejase de llevar jóvenes a su casa para, según la versión del ahora fallecido, ayudarles porque estaban en situación de vulnerabilidad. Tanto es así, que le habían recordado que la forma de ayudar a los necesitados por parte de la Iglesia no incluía llevarse a jóvenes en situación de marginalidad a los domicilios particulares. Sin embargo, el canónigo hizo oídos sordos a esa sugerencia de sus superiores.