Fin de semana de perros en Galicia: lluvia, frío, granizo y hasta nieve

Un arcoíris doble se asentó la mañana de este viernes sobre la ría de Vigo como anuncio de lo que está por venir este fin de semana: lluvia, frío, granizadas, rayos nieve pero también algunos ratos de sol. Tras unos días de tiempo inestable típicamente primaveral, Galicia volvió en la tarde-noche de este jueves, en la recta final de abril, al invierno.

Una borrasca atlántica entró en la comunidad por la fachada atlántica y desde entonces está dejando importantes cantidades de lluvia, sobre todo en las Rías Baixas. En la estación de MeteoGalicia situada en Baiona se recogieron desde las 20:00 de ayer hasta las 8:00 más de 32 litros por metro cuadrado, casi lo mismo que se había registrado en ese punto en los primeros 21 días del mes. En las zonas de montaña de Ourense y Lugo cayeron nevadas; la estación de Cabeza de Manzaneda ha amanecido bajo un considerable manto blanco.

Después de un invierno suave, en comparación con la serie histórica, el territorio gallego afronta a finales de abril jornadas más propias de enero. ¿Cómo se explica esta anomalía? La respuesta, amigo mío, está en el viento. En concreto, en el que opera en las capas más altas de la atmósfera, conocido como corriente en chorro (jet stream, en inglés). Según explica el meteorólogo de Meteored Francisco Martín, en el origen de la situación está un potente anticiclón de bloqueo situado en Escandinavia, que está obligando a las borrascas a dividir sus caminos: algunas van hacia el norte polar, otras hacia el sur, a las latitudes en las que está la península ibérica.

Ese mismo patrón se repite con el jet stream: el anticiclón está partiendo el chorro polar y uno de los ramales, orientado de noroeste a sureste, está arrastrando los centros bajas presiones hacia el territorio gallego. "La próxima borrasca que entrará por Galicia se generó al sur de Groenlandia, ese río atmosférico la está trayendo hasta nosotros", explica Martín.

De acuerdo con la previsión de MeteoGalicia, este viernes habrá aire muy frío en capas altas de la atmósfera, que provocará intervalos nubosos, con chubascos, más frecuentes e intensos en la segunda mitad del día, ocasionalmente acompañados de granizo y aparato eléctrico. La cota de nieve estará sobre los 1.200-1.300 metros. Las temperaturas mínimas experimentaron un moderado ascenso, mientras que las máximas continuarán sin cambios. Los vientos soplarán de componente sur siendo de dirección variable en la segunda mitad de la jornada.

No se esperan cambios significativos para el sábado, con inestabilidad atmosférica, ya que continuará el aire frío en las capas altas de la atmósfera. Así, los cielos estarán parcialmente cubiertos, con chubascos más frecuentes e intensos por la tarde. Las temperaturas registrarán un ligero descenso. Los vientos soplarán de componente oeste, flojos por la mañana, aumentando a moderados por la tarde.

El domingo habrá una jornada de transición, con una nueva baja acercándose por el Atlántico. Con esta situación, se esperan cielos con intervalos nubosos y algunas lluvias ocasionales aisladas. Las temperaturas registrarán un ascenso entre ligero y moderado, con vientos flojos, de componente oeste. La semana próxima la inestabilidad y el tiempo cambiante marcará la tónica general, aunque los termómetros irán recuperando valores más habituales para la época.