Este verano habrá conciertos y la Xunta anunció este jueves una relajación de las restricciones inicialmente previstas, tras la mejora de la situación epidemiológica en la comunidad. La gran novedad está en las actuaciones donde los asistentes estarán de pie: serán al aire libre y podrán reunirse hasta 5.000 personas cuando el aforo máximo antes era de 1.000 personas. Además podrán beber y comer, una opción que tampoco estaba programada. El aforo máximo será el 33% de la superficie útil del recinto. 

El conselleiro de Sanidade y el de Cultura, Julio García Comesaña y Román Rodríguez, respectivamente presentaron el nuevo protocolo para los espectáculos, todos al aire libre, de este verano. Los conciertos con el público sentado podrán congregar hasta 10.000 personas, pero los asientos deberán estar preestablecidos. Y también se podrá comer y beber. El aforo máximo será el 50% del espacio útil del recinto. 

En los espectáculos con el público de pie, se fijarán grupos de un máximo de 500 personas cada uno, que tendrán sus propios servicios (aseos, ...), y sus propios circuitos de entrada y salida y con zonas propias para tomar algo. Los asistentes solo podrán sacarse la mascarilla en el momento de la consumición. 

En los conciertos con público sentado, también se dividirá el recinto, en este caso en sectores de mil personas, con sus propios servicios y sus circuitos de entrada y salida. En este caso, podrán consumir en las zonas especialmente habilitadas para ello o en sus asientos. 

Todos los conciertos, con público de pie o sentado, deberán tener registro de asistentes y venta de entradas por adelantado y se habilitará un espacio para personas que presenten síntomas COVID. Además, se deberá garantir la separación entre grupos.