Galicia ha vivido la peor cuesta de enero de su historia. La que dibujan la curva de casos activos y de ingresados por COVID-19. El virus no toca techo por ahora y avanza en su voraz expansión. Las personas diagnosticadas con la infección ascienden este viernes a 22.124 (+511), de las que 1.331 (+52) precisan hospitalización.

El mayor incremento se aprecia en los pacientes con cuadros clínicos menos complejos, que se sitúan en 1.121 (+35) mientras los más graves se elevan hasta 210 (+17).

El ritmo de contagios diarios tampoco ofrece una tregua con 1.644 nuevos positivos en un día. Las labores de rastreo de infectados se intensifican: las últimas 13.653 PCR efectuadas (récord de la pandemia) confirmaron otros 1.390 casos. Las pruebas diagnósticas contabilizadas hasta la fecha suman 1.384.089.

Otro índice destacado en el balance estadístico del Sergas de este viernes es elevado número de altas médicas: 1.103. Tal y como ocurrió ayer, las curaciones superan el millar, una cifra que muy problamente se repetirá en los próximos días al superar el virus aquellos pacientes con cuadros leves o asintomáticos que dieron positivo en las últimas semanas. Cabe recordar que los contagios diarios encadenan más de quince días por encima de los mil.

El dato acumulado de personas que han logrado superar el coronavirus desde marzo se sitúa en 70.459, de los 94.289 casos registrados. La peor de las noticias la han brindado, una jornada más, los fallecimientos, que escalan hasta los 1.718. El área que mayor mortalidad registra es A Coruña con 400 decesos, seguida por Ourense con 347, y Vigo con 318. En el extremo opuesto está Pontevedra, con 105.

La situación ha empeorado en todas las área sanitarias y A Coruña sigue a la cabeza con 5.912 (+57) casos activos. Pero el incremento de la incidencia acumulada aún ha sido mayor en el área de Vigo, con 3.799 (+118); Santiago notifica 3.373 (+102); Pontevedra, 2.246 (+92); Lugo, 2.009 (+31); Ferrol, 1.796 (+90); y Ourense, 2.989 (+21).