Son los chicos que cursaron la EGB y se reían por la tarde con "La Bola de Cristal" mientras comían su bocata de nocilla; los que pidieron a los Reyes Magos el Cinexin y las barriguitas; los que comenzaron sus primeras salidas nocturnas al ritmo de Nacha Pop, Radio Futura, Siniestro Total y, por supuesto, los que ya a finales de los 80 comenzaron a apasionarse por las motos.

Estos chicos, hoy a las puertas o en plena cuarentena, protagonizaron ayer la I Concentración Ochentera de Vigo en la que una treintena de moteros con espléndidas motos de la época comenzaron por la mañana un recorrido desde Alcabre a Baiona pasando por Ramallosa, Panxón, Saianes, Canido y Samil y las principales calles de Vigo.

Los moteros terminaron su recorrido, como no podía ser de otro modo, en "Los 80", un bar temático ubicado en Alcabre que fue el encargado de organizar el evento. Sus propietarios, Pablo Álvarez y Manuel Cabezas, son también unos nostálgicos de la época y amantes de las motos clásicas ochenteras. Para montar este bar recorrieron tiendas y rastrillos de toda España en busca de los numerosos objetos de la época que lucen en sus estanterías y vitrinas y que arrancan siempre el emocionado "¡Eso lo tenía yo!". Así, se pueden ver desde televisiones de la época, revistas, bicicletas, ordenadores, numerosos juguetes, artículos de papelería y, por supuesto, motos.

"Yo creo que a todos nos gusta recordar esa época porque entonces éramos pequeños, no teníamos responsabilidades, jugábamos, salíamos, y éramos felices", comenta Manuel. Esos recuerdos compartidos y la pasión por las motos clásicas han sido el germen de esta primera concentración, que espera tener continuidad. "Hay muchos moteros que son apasionados de las motos ochenteras, incluso talleres especializados en ellas; es un elemento más de esta pasión por los 80 que ahora tiene más fuerza que nunca", añade Pablo.

Fran González, uno de los participantes, destaca de estas motos "su personalidad". "Son motos que las ves y las sientes, para momentos especiales", describe apasionado a lomos de una Ducatti Paso.