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Juguetes para un Vigo orgulloso de su niñez

La Fundación Raquel Chaves trabaja desde 2006 por la puesta en marcha del "Museo Galego da Infancia, Xogo e Xoguete"

Hace ya diecisiete años se constituía en Vigo la Fundación Raquel Chaves, entidad social que sin ánimo de lucro nacía con el fin de recuperar la memoria de los que algún día fueron niños. Un baúl de los recuerdos que parece no tener fondo y en el que más de 12.000 piezas buscan desde entonces dejar sus empolvadas estanterías para pasar a ser máquina del tiempo de quien desee hacer del pasado su presente.

Esta fundación, que fue declarada "de Interese Galego" un año despúes de su creación, ha ido conformando desde su constitución en 1994 su propia colección a base de juguetes y trocitos de recuerdos. Desde cromos a canicas, pasando por los juguetes bélicos que parecen no pasar nunca de moda, llegando inlcuso a las clásicas muñecas con las que muchas niñas jugaron y que muchas otras nunca llegaron a conseguir.

De este modo, el plástico, material dominante en los juguetes actuales, deja su trono para rendirse ante los tradicionales juguetes de piel de latón, cartonpiedra y madera. Y es que no estamos ante una colección aficionada, sino que el recopilatorio de la Fundación Raquel Chaves es la más importante de España y una de las más destacadas de Europa.

Juguetes de numerosas partes del mundo que conviven en esta amalgama temporal y cultural. Y es que en la Fundación cuentan con artículos de más de 2.000 años de antiguedad, como es el caso de la pieza cedida por el concejal de cultura de la comuna de Torrita Riverina(Italia). Algunas fueron cedidas a la entidad, muchas otras son de propiedad de la misma, pero todas ellas guardan una historia entre sus ranuras.

No se trata solo de juguetes, sino que la colección cuenta también con un amplio abanico de artículos relacionados con el mundo de la infacia. Entre esta sección de la colección destacan los recuerdos de la centenaria fábrica La Artística, que ofrecía a sus trabajadoras la posibilidad de llevar a sus niños a la Casa Cuna, donde eran cuidados mientras ellas ganaban su pan.

Otra de las joyas de la colección son los artículos relacionados con el payaso español, Charlie Rivel, del cual se conservan fotografías, targetas postales y carteles de sus obras más importantes.

Pero las piezas estrella de esta colección son los propios juguetes, entre los cuales se conservan numerosos de fabricación viguesa. Los años treinta, cuarenta y cincuenta fueron "época dorada" de estas creaciones, ya que empresas como Fundiciones Rey, Manufacturas Juvers y Editorial Hergan, entre otras, dedicaban parte de su labor a la fabricación de juguetes con denominación de origen viguesa. Muchas de estas obras de artesanía son ahora propiedad de la Fundación.

Esta entidad viguesa vive de la nostalgia y con recelo guarda miles de piezas de gran valor, tanto cultural como sentimental. La Fundación Raquel Chaves no duda en hacer partícipe de su tesoro a los coetáneos de dichas piezas pero también a los que con curiosidad y desconocimiento apuestan por ser partícipes de esta colección que con cuidado parece embalsamar los años.

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