El Padre Jony no defraudó en su concierto del antiguo pabellón de Tui, donde ayer llevó su rock cristiano ante algo más de medio millar de personas y en el que antes de la actuación, ofició una misa. Tras retirar el altar, el cura invitó al público, que estaba sentado en las gradas del pabellón, a levantarse y ocupar la parte centra. "No sabemos tocar de otra manera", alentó.
El sacerdote catalán Enric Reverté, conocido como Padre Jony, tiene sus incondicionales en la provincia, en la que ha actuado anteriormente de la mano de la asociación Juventud Unida en Marcha del padre Celso, y no defraudó.
Lo cierto es que el cura, vestido con cazadora de cuero y alzacuellos, se entregó en cuerpo y alma ante un público heterogéneo –había desde adolescentes hasta personas mayores–, con temas como "Pescador de hombres" y "Aborregau", versión rock y rap del "Que alegría cuando me dijeron, vamos a la casa del Señor".
Reverté, rector de una parroquia en Alcanar, ya ha editado dos discos y aspira a salir de bolos este verano para popularizar su estilo eucarístico. Le encantaría poder actúar en la catedral de Santiago –recientemente protagonizó la primera misa rockera de España en la catedral de Tortosa (Tarragona)– con motivo del año Xacobeo.
