Con una trayectoria profesional unida desde sus inicios a la cultural, la filosofía y las bellas artes, Monserrat Iglesias ha trabajo toda su vida en prestigiosas instituciones como Harvard o Princeton en el extranjero o el Instituto Cervantes o la Universidad Carlos III en España.

-¿Qué supone para usted un reconocimiento de la asociación de "Amigos de Pontevedra" que premie su carrera como periodista y también por su contribución a la ciudad?

-Yo la asociación ya la conocía, está muy enrizada en la ciudad, pero lo que menos me esperaba era ganar un premio. Desde el primer minuto me hizo muy feliz. Además, mi padre Pedro Iglesias, que fue presidente del S.D. Teucro y directivo del Pontevedra C.F. , pues le hubiera gustado mucho saber que me han concedido este premio. Entonces tiene esa parte sentimental, a parte del orgullo que sienes cuando te premian desde tu casa.

-¿Había recibido algún premio de este tipo anteriormente?

-La verdad es que no, yo he recibido premios académicos y reconocimientos por mi trabajo, pero algo que la sociedad civil te da como en este caso pues es la primera vez. Además, de mi ciudad de la que me siento muy orgullosa de representar allá a donde voy, pues lo hace todavía más especial.

-¿Qué le llevó a elegir la carrera de Filología hispánica?

-En ese momento para mí era importante hacer algo que me apasionara. En este caso eran las letras. Después en los doctorados en el extranjero ya hice cosas más relacionas con la filosofía y las bellas artes, pudiendo así ampliar todo este camino. En la Carlos III es donde he desarrollado mi carrera profesional más tiempo y donde ahora estoy trabajando. Pero siempre en el mundo de la cultural y de las artes, siempre ha sido mi entorno y mi vida.

-Después de haber dado clases en Universidades tan prestigiosas como Harvard, Brown, Princeton o Columbia, ¿Cómo es dar clases ?

-Fue una gran experiencia, yo empecé dando clases en universidades americanas nada más acabar la carrera, y son entidades que ofrecen grandes ventajas. Cuando estás enseñando en Harvard o en Princeton, a parte de que te tratan fenomenal y es muy reconfortante, es que los estudiantes tienen una gran capacidad de trabajo individual en relación, como, por ejemplo, los españoles.

-¿Qué significó para su carrera llegar a ser la directora de Cultura del Instituto Cervantes?

- Es un gran privilegio porque el Instituto Cervantes es único en el mundo. En la lengua inglesa existe el British Council, pero no tiene la implantación cultural tan importante como Cervantes, porque además de enseñar y difundir la lengua española, hace una importante labor cultural en más de 70 centros en los cinco continentes. Es un instrumento privilegiado porque no se identifica con ningún gobierno en concreto, sino con un país. Trabajando allí y aprendí que la cultural española tiene un enorme prestigio en el exterior y me gustaría que tuviera mucho más apoyo por parte de los gobiernos.

-¿A dónde cree que avanza la comunicación? ¿La comunicación digital es el futuro?

-En cuanto a la comunicación, hora como delegada del rector para las artes y la cultural digital en la Carlos III voy a comenzar un proyecto que surge de mi creencia de que el entorno digital puede servir para difundir la cultura. Es en colaboración con la Real Academia Española y Conde Nást, y se llama "Amamos la poesía", una iniciativa en la que grandes creaciones poéticas en español son recitadas por actores y actrices de gran prestigio a través de vídeos que se difunden por medio de las redes sociales. Es un proyecto que también se pretende llevar a otros ámbitos de la educación. Para mí el mundo digital ofrece grandes oportunidades aun por explorar, como en este caso la difusión de la literatura y la posía. Además, en el entorno digital cuando la gente ve contenido de calidad, la aprecia y la valora mucho.