Los sindicatos de prisiones Acaip-UGT, CC OO, ATP, CSIF y CIG aclaran que no se están quejando por realizar su trabajo, que incluye resolver este tipo de incidentes violentos, pero sí que alertan de que no dejarán de denunciar la "cada vez más precaria situación en que desempeñamos esa labor".

Indican que el envejecimiento de las plantillas y la "alarmante falta de personal hace cada vez más difícil desempeñar nuestro cometido con la debida diligencia, y nos vemos sometidos a una carga de trabajo desproporcionada, expuestos cada vez a más riesgos y sin reconocimiento profesional".

Es por ello que piden a la administración que se "tome en serio" este "grave problema" y reclaman "más seguridad, más personal y la retribución adecuada a la importancia y a la dificultad de la labor que desempeñamos".