Las obras de mejora de la seguridad viaria y ampliación de calzada de la carretera PO-230 que ejecuta la Xunta en Vichocuntín y Serrapio, ya tiene ejecutados todos los desmontes necesarios para ganar el espacio que permitirá ensanchar el vial, por lo que, con el comienzo del año, se iniciará la segunda parte de la obra.

Pero el Concello de Cerdedo-Cotobade quiere que esta mejora se extienda en primer lugar hasta la aldea de Fentáns, en el territorio de Cotobade, y finalmente hasta Praderrei, en el vecino municipio de Campo Lameiro.

En cuanto a las obras que se están ejecutando en la actualidad, se pretende incrementar la seguridad vial de un tramo de 1.780 metros con el ensanche y mejora de la calzada hasta los siete metros en vez de los cinco actuales, la rectificación de diversas curvas peligrosas y cerradas del trazado, el drenaje de la plataforma, el revestimiento de las zanjas, la construcción de muros y la renovación de la señalización horizontal y vertical y del balizamiento.

Hasta ahora las tareas se centraron en la tala de árboles, los movimientos de tierra y los desmontes.