La flota pesquera amarrada, las actividades escolares y deportivas al aire libre suspendidas, los servicios de emergencia con salidas constantes y complicaciones en la circulación son algunas de las consecuencias del temporal de lluvia y viento que azotó la comarca durante la jornada de ayer, especialmente de madrugada, con rachas que rozaron los 100 kilómetros por hora en zonas costeras, especialmente en Sanxenxo, aunque hacia el interior de la ría la intensidad fue menor, en torno a los 60 o 65 km/h, según los datos de Meteogalicia.
Este temporal, que activó la alerta naranja, provocó un reguero de incidencias en toda la comarca e intervenciones constantes de los servicios de emergencia, si bien ninguna de especial gravedad, según indicaron fuentes de estas plantillas.
Algunos de los incidentes más llamativos se registraron en Poio, con un velero que quedó a la deriva y embarrancó en la playa de Raxó, y la caída de un poste telefónico en la zona de O Vao. Su desplome afectó al servicio y cortó un camino de la zona, además de causar algún desperfecto en una vivienda próxima. Hasta el lugar acudieron efectivos de la Policía Local, además de otros servicios, para retirar el poste y restablecer la normalidad. La empresa Naturgy de suministro eléctrico no tenía, en cambio, ninguna alerta por alteración del servicio hasta las seis de la tarde de ayer.
Bomberos
En el municipio de Pontevedra los incidentes se concentraron en las primeras horas de la mañana, entre las siete y media y las diez. En ese intervalo, los Bomberos tuvieron que acudir a retirar un árbol caído en un vial de Campañó, así como a la zona de Mollabao y A Chamusca por la caída de un poste y desperfectos en parte del alumbrado navideño, que tuvo que ser reforzado.
El servicio del 112 informó a media tarde de que durante la jornada recibió el aviso de 115 incidencias en la provincia, trece de ellas desde la capital, sobre todo caídas de árboles, bolsas de agua en las carreteras y postes desplomados. En Marín se registraron problemas en algunas arquetas que se levantaron por la acumulación de agua y en Sanxenxo el viento causó algunos desplazamientos de contenedores y señales, algo similar a lo ocurrido en otros municipios de la comarca.
Durante toda la jornada se suspendieron las actividades extraescolares y deportivas en colegios e instalaciones municipales, si bien se mantuvo el transporte escolar.
Precipitaciones
Los problemas circulatorios fueron otra consecuencia del temporal de ayer, debido sobre todo a la acumulación de agua en la calzada, puesto que la de ayer fue una de las jornadas con más intensas lluvias de los últimos meses.
En Pontevedra se registraron en apenas quince horas -entre medianoche y las tres de la tarde, el periodo de mayor incidencia del temporal- más de 40 litros de agua por metro cuadrado, una cantidad que incluso se superó en la estación de Cotobade, mientras que en Sanxenxo se superaron con creces los veinte litros, así como los treinta en Caldas de Reis.
Estas intensas precipitaciones provocaron la crecida de los ríos, mientras que el embalse del Pontillón se encuentra al 100 de su capacidad. La estación de medición de Augas de Galicia en el río Lérez en Monte Porreiro, registró ayer un caudal máximo de 121 metros cúbicos por segundo, que se estabilizó en un caudal medio de unos 57, junto con una altura del nivel del agua de poco menos de cuatro metros, uno de los datos más destacados de todo el año.
