El entorno del pazo de Quintáns ya comienza a tener otro aspecto tras los trabajos de limpieza y mantenimiento de sus jardines. Se trata de una finca de más de 10.000 metros cuadrados que rodea el pazo y que es un auténtico tesoro botánico con tanto valor como el propio edificio que se va a rehabilitar.

La amplia finca, una vez rehabilitado el edificio, permitirá que los vecinos disfruten de un enclave privilegiado, pues a la belleza de su contenido hay que sumar las vistas que ofrece sobre las dos rías y la zona de A Lanzada.

Los trabajos consisten en inventariar el arbolado y la vegetación de la finca; el desbroce y eliminación de plantas invasoras y trepadoras; y trabajos de mantenimiento y podas de conservación.Hay que tener en cuenta que los amplios jardines de la finca no han tenido ningún tipo de mantenimiento en veinte años.