El delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, visitó ayer la base General Morillo acompañado por la subdelegada, Maica Larriba, donde fue recibido por el jefe de la brigada, el general Antonio Romero. Allí se interesó por el funcionamiento de la unidad de infantería ligera aerotransportable, Brilat, que está especializada en trabajar en terrenos difíciles con cualquier clima.

Además de visitar una exposición estática de armamento y material, observar la sala histórica de la Brilat y firmar en el libro de honor, Javier Losada conoció los detalles sobre la próxima misión en el Líbano, que ya empezó en agosto con una treintena de militares encargados del reconocimiento de la zona.

A partir de noviembre, unos setecientos miembros de la Brilat formarán parte de las Fuerzas de Paz de la ONU -los cascos azules- en este país de Oriente Próximo, en concreto, en la denominada Línea Azul, un área fronteriza entre el Líbano e Israel, donde España es responsable del sector este, el más complejo e inestable.

La misión allí está vinculada a pacificar el área, para lo que los militares se centrarán en labores de vigilancia, observación y mediación para evitar enfrentamientos. Para ello, los miembros de esta unidad que está desplegada en Pontevedra, Asturias y Valladolid se han preparado en Zaragoza.

El control de la frontera libanesa-israelí está dividido en dos sectores y España tiene bajo su responsabilidad el sector Este, el más complejo e inestable (dado que limita con los Altos del Golán y la frontera siria, por lo que la inestabilidad en este país también es clave para la seguridad en la zona). También incluye puestos avanzados en algunos de los lugares de más inestabilidad en esta frontera, como el de Ghadja, una ciudad que parte en dos esta línea azul y en el que falleció el cabo Javier Soria como consecuencia del fuego de artillería israelí en enero de 2015.

Javier Losada incidió durante la visita en las virtudes de la Brilat, una unidad "cohesionada, moderna, operativa y con personal de acreditada competencia". Sus anteriores experiencias fuera del territorio nacional en Bosnia-Herzegovina, Kosovo, Afganistán y Pakistán.

Además de su cometido en el Líbano, la Brilat también afronta en noviembre un despliegue en Mali. En el país africano también desarrollará funciones vinculadas a la pacificación de un territorio que estuvo en conflicto entre 2012 y 2015.