Rafa Domínguez mantuvo esta mañana una reunión con responsables de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Pontevedra (Aproin) para abordar cuestiones relativas a la situación que atraviesa la ciudad del Lérez en esta materia.

Entre otros asuntos, el presidente local del PP de Pontevedra destacó "el obsoleto PXOM por el que se rige el planeamiento urbanístico de nuestra ciudad", que data del año 1989 y que ya ha sufrido numerosas modificaciones puntuales a lo largo de estos años. "Pontevedra en lugar de mirar tres décadas hacia delante, está mirando tres décadas hacia atrás", señaló.

"Pontevedra necesita actualizarse y renovarse. Contar con un nuevo Plan Xeral que permita diseñar un proyecto de futuro para Pontevedra", destacó Domínguez, "¿Por qué no lo hace el BNG de Pontevedra? Porque para ellos el empleo y las empresas no son importantes, o más bien, no son cosa suya que viene a ser lo mismo", añadió.

Un nuevo PXOM permitiría planificar la creación de suelo empresarial, ofreciendo así "espacio para las empresas que se quieran instalar aquí y logrando con ello la generación de puestos de trabajo y oportunidades para nuestros vecinos", recalcó el edil popular.

"Necesitamos más suelo industrial y más suelo empresarial para que las empresas tengan facilidades y espacio en el que asentarse, para que esas empresas se ubiquen en Pontevedra y frenen la sangría del paro en la ciudad", recalcó el presidente de los populares. "Pontevedra, en comparación con las otras siete grandes ciudades de Galicia, está a la cola tanto en renta media como en empleo o en creación de empresas", recordó, "Para el alcalde del paro esto no es un problema. Para mí es la principal preocupación de esta ciudad", manifestó Rafa Domínguez.

"Para un alcalde que no le coge el teléfono a empresas como Ikea o Eroski, que quieren crear empleo en Pontevedra, todo esto no es un problema y que haya suelo industrial, tampoco", puntualizó, "Pontevedra necesita actualizarse urbanísticamente. Además de estética, Pontevedra necesita planificación".

Rafa Domínguez recuerda que esta situación es "un clamor tanto de asociaciones de empresarios como Aproin, como de los propios profesionales como el Colegio de Arquitectos de Galicia" por lo que considera necesario que "el alcalde los escuche".