Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Antonio Castillo: "A los escritores gallegos les han interesado mucho los toros"

"Valle-Inclán decía que el toreo no era un arte menor sino comparable a la escultura"

Antonio Castillo Rebollo. // Carlos Montero

El Casino Mercantil fue escenario ayer de la conferencia "Algunos gallegos que escribieron de toros" a cargo de Antonio Castillo, aficionado al arte de Cúchares que protagonizó este encuentro literario promovido por la Coordinadora de Peñas Taurinas.

- ¿Los escritores gallegos se han interesado mucho por los toros?

-Bastante más de lo que a primera vista pudiera aparentar, a los escritores gallegos les han interesado mucho los toros, muchos escribieron sobre ellos. En mi conferencia hablo de unos pocos, no de todos, y no hablaré del tópico más manido que podría ser Camilo José Cela porque es sumamente conocido y está muy estudiado, así que voy a hablar de gente de la que ya no hay memoria, muchos de ellos grandísimos periodistas.

- Como Luis Taboada

-Por ejemplo, un periodista vigués famosísimo de finales del XIX y principios del XX, tiene muchos libros publicados en los que recogía sus artículos, porque fue un gran articulista a pesar de que hoy esté totalmente olvidado. Y al igual que Luis Taboada en la conferencia hablo de gente que es totalmente desconocida en la actualidad. Me refiero tanto a los que escribieron a favor como en contra, y entre estos últimos están dos frailes benedictinos del siglo XVIII, de los más famosos que existieron, que fueron Feijoo y Sarmiento. Y a partir de ahí hay una pléyade de escritores tremenda, podría hablar de Alberto Insua, de Alejandro Pérez Lugín, de Elena Quiroga, que tiene una gran novela taurina, una escritora casi coetánea a nosotros que escribió esa obra en 1959. Hay muchísimos, y a mayores algunos que no voy a mencionar como Wenceslao Fernández Flórez o Julio Camba, que tiene varios artículos escritos en los años 30 sobre los toros.

- Lo que si es conocido es el gran afecto que Valle-Inclán sentía por Belmonte

-Un gran afecto y no solo eso, Valle-Inclán cuando Belmonte no era nada, siendo un simple novillero, le organizó un banquete homenaje. Belmonte debutó en Madrid, tuvo un éxito impresionante y Valle-Inclán le organizó un banquete homenaje y escribió un texto en el que básicamente viene a decir que el arte del toreo no es un arte menor sino arte mayor, comparable a otras artes como la escultura o la escritura, eso lo dijo Valle-Inclán y escrito está.

- ¿Fue en ese momento cuando le dijo a Belmonte que para ser perfecto solo le faltaba morir en la plaza?

-No, eso fue después, ellos mantuvieron una amistad que duró muchos años, yo tengo una foto de Valle-Inclán en la finca de Juan Belmonte, una finca cercana a Sevilla donde el torero criaba ganado bravo, y se ve a Valle-Inclán a caballo con Juan Belmonte. Y esa frase que dice fue una apelación estética que le hizo Valle-Inclán a Juan Belmonte, le dijo "para ser perfecto solo te falta morir en la plaza", y Juan Belmonte le contesto "se hará lo que se pueda, don Ramón, se hará lo que se pueda".

- Es usted librero

-Era, ya estoy retirado, lo lleva mi hija y la ayudo, he estado de librero muchos años.

- Desde fuera parece una de las profesiones más maravillosas

-Ser librero es la mejor profesión del mundo para mi, he tenido muchas profesiones porque fui un gallego de la diáspora, me embarqué con 17 años y desde entonces no he vuelto a casa prácticamente y ya tengo 74 años. Sin duda alguna volvería a ser librero, es una maravilla por muchas razones, muchísimas, no solo por los libros sino por la cantidad de gente que conoces, estoy hablando del libro antiguo, no del moderno, que ha hecho que tenga cantidad de amigos en toda España, amigos que primero fueron clientes pero que terminamos siendo amigos. Y además el libro es un universo infinito, nunca se acaba y siempre estás aprendiendo algo, todos los días.

- Se ha interesado por la teoría del Colón gallego

-También, me interesan muchas cosas (risas) pero es que a la teoría del Colón gallego quizás he llegado demasiado tarde, lo cual lo siento en el alma, si hace 20 años hubiese caído en la cuenta del tema del Colón gallego le hubiese dedicado todos los esfuerzos, pero llegué demasiado tarde y aún así he leído bastante, incluso tengo un pequeño catálogo de libros sobre Colón, y estoy muy contento porque es algo que se está investigando muy bien. Conozco muchos investigadores en otros campos y por lo general el investigador es un ser muy egoísta, no comparte nada hasta que está seguro de que ha alcanzado el cenit, el éxito en su investigación, no te da ni un dato y sin embargo los investigadores del Colón gallego lo están haciendo muy bien porque enseguida te informan de todo lo que van descubriendo, lo que van analizando y comparando y creo que lo llevan muy bien encauzado, estoy impresionado, solo lamento haber llegado demasiado tarde, no haber caído antes en la cuenta.

- ¿Considera que la teoría es verosímil?

-Es que hay tantísimas coincidencias que es imposible no sentirse entusiasmado con el tema del Colón gallego, no es que haya un indicio por ahí, es que hay un montón de coincidencias y esto es imposible, en historiografía y en otros terrenos similares la coincidencia apenas existe, y aquí es abrumador.

- ¿Se explica que los descendientes del duque de Veragua tuviesen propiedades en Portosanto, en Poio?

-Es rarísimo, porque yo he estudiado mucho al duque de Veragua. Soy muy aficionado a los toros y el duque de Veragua en el siglo XIX y principios del siglo XX fue el ganadero de reses bravas más importante de España, tanto el padre como el hijo a partir de la muerte de Fernando VII en 1833 o 1834, los más importantes, y tenían tierras por toda España, pero en Galicia no sabía que hubiesen tenido nada. Es algo de lo más chocante, ya no es casualidad, es asombroso, que esta gente tuviese propiedades en Poio es para no creerlo, tenían dehesas muchos sitios, una ganadería con más de 1.000 vacas de vientre, con tierras en Zamora, en el Jarama, en Aranjuez, en otros sitios más, pero ¡en Galicia! Es una cosa rarísima que indica que aquí hay algo más. La pena es que el duque de Veragua tenía un palacio en Madrid y prácticamente se destruyeron los archivos, estoy hablando de memoria pero es probable que así fuese pero habría que seguir investigando por ahí: ¿por qué esta gente tenía tierras en Poio? No me cabe en la cabeza a no ser que su familia hubiese recibido algo en herencia en Poio.

Compartir el artículo

stats