La Guardia Civil considera que con la última operación antidroga desarrollada en el poblado de O Vao de Abaixo se dan por desarticulado dos clanes familiares distintos y a los que se les considera como "los principales responsables de la venta y distribución de estupefacientes en la zona". La Guardia Civil destacó también la "peligrosidad" de estos "dos grupos criminales perfectamente diferenciados y muy activos", como pone de manifiesto la incautación de distintas armas blancas, así como de fuego. Concretamente, dos pistolas de fuego real, dos simuladas y una escopeta de caza aparentemente inutilizada para disparar. Los agentes resaltaron el hecho de que las dos pistolas de fuego real estuviesen en "perfecto estado de funcionamiento" y que una de ellas tuviera "alojado el cargador provisto de munición y dispuesta para disparar, lo que evidencia la potencial peligrosidad de estos clanes".
En los registros efectuados se incautaron dos mil dosis de heroína, y 1.150 de cocaína que los chabolistas ya tenían distribuídas y preparadas para la venta, así como seis básculas de precisión y sustancia para el corte de la droga.
Una mujer, a prisión
Los diez detenidos comenzaron a prestar ayer declaración ante el juzgado de instrucción número 1 de Pontevedra, en funciones de guardia. Ante la magistrada titular del mismo comparecieron cuatro de los arrestados, quedando tres de ellos en libertad aunque con la obligación de comparecer semanalmente y se acordó la prisión provisional comunicada y sin fianza para un cuarto detenido, una mujer identificada como J. J. J., según fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. Estos cuatro serían miembros de uno de los clanes familiares identificado como el de la "Joaquina".
Mientras, el resto de los detenidos permanecen en la Comandancia de Pontevedra a la espera de que previsiblemente sean puestos a disposición judicial a lo largo de la mañana de hoy, según indicaron fuentes de la investigación. Los seis serían miembros del segundo de los clanes familiares desarticulados ayer.
La Guardia Civil acusa a los detenidos de pertenencia a grupo criminal y tráfico de drogas, aunque también se podrían estar dedicando a la receptación de artículos procedentes de robos. De hecho, en los registros efectuados durante la mañana de ayer se les intervino una considerable cantidad de material y efectos cuya procedencia legal no pudieron acreditar. Entre ellos ayer en la Comandancia de la Guardia Civil se exhibían televisores, videoconsolas, teléfonos móviles, joyas y dinero en efectivo (7.000 euros en total).
Cinco vehículos
También se decomisaron varios vehículos, concretamente tres furgonetas, dos turismos y una motocicleta.
Según explicaron fuentes del Instituto Armado, el operativo es fruto de otras anteriores intervenciones desarrolladas en el poblado este mismo año en abril y en mayo, concretameten en O Vao de Arriba, y que en aquel entonces se habían saldado con otras nueve personas arrestadas.
Aunque la Guardia Civil da por desarticuladas ambas organizaciones, la operación no se da totalmente por cerrada, dado que estarían en situación de busca y captura otros dos sospechosos que los agentes tenían previsto arrestar ayer pero que finalmente no se encontraban en O Vao en el momento de la redada o, si lo estaban, lograron eludir el cerco policial.
