"No creo que vivamos en una democracia", protesta Baños Boncompain, "vivimos en un régimen parlamentario, es la escenificación de un juego pero democracia, si entendemos que es el poder de la gente, ya me dirá de qué tipo hay". El periodista y escritor participó ayer en la sesión inaugural de la Semana Galega de Filosofía 2016 y no dudó en criticar una farsa de sistema político "donde la gente no tiene capacidad alguna ni de mandar ni en las pequeñas cosas, ni a nivel local ni personal, ni menos las importantes, vivimos en un régimen parlamentario que es un escenificación muy del siglo XIX si se quiere de algo que quizás alguien creyó que podría llegar a ser una democracia, y lo del fascismo lo peor es que cada vez es menos oculto, ya no solo porque cada vez haya más partidos de ultraderecha en toda Europa sino porque las decisiones se toman de arriba debajo de modo arbitrario e incontestable"
-¿Qué aspectos del "procés catalá" aborda en la Semana de Filosofía?
-El procés es un tema muy pesado y recurrente (risas) pero muy desconocido fuera de Cataluña y tiene unas complejidades y dinámicas que no se explican porque lógicamente hay que vivirlo. La idea es reenmarcar el procés catalá desde los conceptos de soberanía, porque es un intento de recuperar soberanía popular.
-¿Más un intento de recuperar soberanía popular que nacional?
-Más, es una lucha más por recuperar soberanía popular que nacional, la capacidad de la gente para decidir lo que quiere, tanto en político como en otros muchos aspectos de la vida.
-¿Tenemos los ciudadanos soberanía?
-No, nadie, no es que los catalanes no tengan soberanía, es que no la tienen los suecos ni nadie, lo que estamos descubriendo con la crisis es eso, que tenemos sistemas parlamentarios que son representaciones pero no tienen capacidad decisoria, hemos visto como a la llamada de Bruselas, a toque de pito, todos los gobiernos, sean del Partido Socialista, del PP, de Convergencia, todo el mundo se cuadra a unos intereses que son contrarios a la gente que ha puesto a esos políticos en el poder, y creo que todo el mundo está descubriendo eso, que el poder no está en donde creíamos que estaba, ni está en los parlamentos, ni está en los gobiernos, está si en algún sitio, vemos sus efectos pero no sabemos ni controlarlo ni fiscalizarlo ni, desde luego, destituirlo, y el procés creo que es uno, uno más de los procesos que hay en el mundo, de toma de conciencia e intento de recuperación de soberanía popular.
-¿Qué espera del proceso soberanista? ¿Cómo cree que evolucionará?
-Ah no, yo espero la república catalana, lo tengo clarísimo, si no no nos metemos, por menos de una república no nos metemos en este embolao claro (risas), la espero.
-¿Y espera la república catalana para pronto?
-Si, la espero y la espero para pronto, el procés tiene un objetivo que es este y es real, proclamar y construir sobre todo una república catalana, porque lo importante es que es una república, catalana es un adjetivo porque somos catalanes pero que sea catalana no es interesante sino construir una república en el siglo XXI. Y ahí hay procesos de reflexión sobre qué es una república, qué es el poder, cómo hacemos para fiscalizarlo y destituirlo, qué instituciones son más eficientes, qué debe ser lo común y lo privado, todas estas reflexiones que son muy del siglo XXI están de actualidad gracias al procés. Entonces al margen de que se considere si Cataluña debe o no ser independiente hay que ver que gracias al procés en la sociedad catalana hay esa reflexión sobre qué es el poder, cómo ha de gestionarse y constituirse.
-¿Cómo será el proceso constituyente?
-Lo vamos a hacer este año, durante muchos meses habrá debates populares organizados para pensar cómo debe ser un país, vamos a movilizar a la gente para que reflexione, s exprese y diga qué instituciones quiere y cómo. Así que lo interesante que ha pasado en Cataluña es un proceso de politización brutal, y eso está muy bien porque hace más adulta y madura a una sociedad.
-Ex presidentes, ministros, conselleiros y hasta ex jefes del estado mayor sentados hoy sin rubor en el consejo de administración de empresas...
-A mi no me ha contratado ninguna gran empresa y estoy muy decepcionado (risas) he entrado en política y solo llama Gas Natural para cambiar la caldera; pero si que lo que expone es una percepción compartida: todo el mundo sabe que hay algo ahí que hace que los políticos vayan de poder a poder, de poder representativo a poder económico, todo el mundo entiende que son los contactos, relaciones e influencias las que gobierna este mundo y no solamente los votos y los parlamentos y los escaños pero todavía no sabemos cómo atajarlo, qué asaltamos, cuál es el palacio de invierno ¿Vamos al Parlamento? Ahí no hay nada, ¿Vamos a las empresas? Tampoco. Y la perplejidad de mucha gente es que hay un poder que ya es muy visible pero que no sabemos identificar, dónde está y cómo bloquearlo o destituirlo, de ahí que mucha gente tenga esa sensación de perplejidad porque no sabemos quién manda, sabemos que nos mandan, es evidente porque sus efectos son devastadores en nuestra vida, pero no sabemos ni quién ni cómo nos manda.
-¿Confía en que tendremos gobierno en breve?
-Me he apostado un par de paellas y me interesa no perderlas (risas) a que habrá gobierno pronto, y precisamente por esto que decíamos: hemos visto muchas veces como pase lo que pase en un estado supuestamente soberano como el español, de repente llaman los que realmente mandan (que no se si es Merkel, la troika, no se quien es), pero alguien llama y Zapatero recorta, alguien llama y... España debe un billón de euros, el 100% del PIB en deuda pública, salía hace dos semanas el informe de la Comisión Europea y deja clarito, hay que recortar entre 8 y 12.000 millones más, hay que volver a subir el IVA y todo eso lo tiene que hacer un gobierno no en funciones, un gobierno, aquí hay que volver a pegar más hachazos, lo que llaman las reformas, así que estoy convencido de que alguien llamará para decir a alguien que se cuadre y forme un gobierno, no se si es el PP, el PSOE etc, y eso será un capítulo más de ese proceso en el que la gente vota a unos partidos pero las decisiones se toman en otro sitio que, repito, no sé si es el IBEX, la troika, seguramente serán todos, y este espectáculo que vemos no tiene mucho más sentido hasta que veamos que llama quien manda, que no son los líderes de los partido.
-Y para acabar de redondearlo todo, el terrorismo integrista.
-Bueno, es que llevamos desde el 2001 diciendo todo el mundo que estamos en guerra y creíamos que las guerras no nos afectan, nosotros estamos en guerra contra ellos (sea quien sea este ellos) y cuando ellos nos atacan resulta que aparentamos escandalizados ¿Pero no estábamos en guerra? Pues las guerras son esto. Me parece todo una vergüenza: hay el atentado de Bruselas y el gobierno belga dice que enviará F16 a bombardear "a ellos", a algún lado. Pues claro, tal vez entonces no te extrañará que ellos vuelvan a poner una maleta-bomba. ¿Entonces mandarás el doble de aviones? ¿Qué sentido tiene bombardear inocentes porque otros han matado inocentes? La opinión pública europea nos hemos estado engañando, lo hizo occidente durante las primaveras árabes fue lamentable, recordaba el otro día que debe haber por España un caballo que seguramente estará vivo que es el caballo de Gadafi.
-Se llama (o llamaba) El rayo del líder, lo último que supe de él fue que lo habían confinado en una pequeña cuadra?
- El rayo del líder, justo, Gadafi le regaló un caballo a Aznar y estábamos encantados, años después bombardeamos Libia que ¿cómo está hoy? Pues es un estado fallido con 5 o 6 repúblicas. ¿Cómo está Siria? La guerra empezó hace 5 años ¿a alguien le interesó entonces? Claro, esta sorpresa y estas caras compungidas por las catástrofes hoy de Bruselas o París pero mañana de cualquier otro me parecen lágrimas de cocodrilo? Lo que sucede es que los muertos inocentes de Bélgica tienen nombre y en toda la prensa salen, y cuando bombardeamos no importa, qué más da, son afganos, sirios.. No tienen nombre ni cara, no deja de ser una guerra colonial, nos escandalizamos si nos ponen bombas y disfrazamos de normalidad absoluta estar bombardeando por parte de Rusia, Estados Unidos, Francia y ahora Bélgica. Siempre pienso que la diferencia entre un terrorista y un ejército es el presupuesto: nos parece horroroso que ellos vengan con una maleta bomba y normal que nosotros enviemos fragatas y aviones de combate, pero los inocentes mueren igual.
-Habrá quien le acuse de comparar un terrorista con un "ejército democrático".
-Ya tuve de hecho esa discusión en una radio, y dije que no hay nada más democrático que una bomba, son terriblemente democráticas, matan a todo el mundo y les da igual que seas de derechas, izquierdas, alto, bajo, o mayor o menor, nuestras bombas efectivamente son muy democráticas, sea donde sea matan a todos.
