Se trata de una labor aparentemente tan prosaica como vaciar cada noche los contenedores de basura colocados en la calle, pero a partir de mañana esta tarea tendrá un "punto" de videojuego. Al menos para el operario que se encargará de manejar los nuevos camiones adquiridos al efecto. Un único trabajador podrá conducir el vehículo, comprobar la carga y el peso de cada contenedor, desplazarlo sobre la tolva del camión, vaciarlo y devolverlo.

Todo ello sin moverse de su asiento, gracias a un joystick incorporado junto al volante, una red de cámaras de televisión que ofrecen imágenes de gran parte del exterior del vehículo y dos pantallas en la cabina, el conductor podrá realizar su labor de una forma muy similar al manejo de una consola de videojuegos.

Este es el equipamiento interior de los dos nuevos camiones que se encargarán de vaciar cada noche los contenedores. Por fuera, otro despliegue de tecnología, centrado en un brazo articulado que se "apodera" de cada depósito y lo vacía en la caja del vehículo por un lateral y no de frente, como hasta ahora.

Y es que además de los mandos interiores, cada contenedor cuenta con un chip que detalla su carga y, sobre todo, su ubicación, con lo que "es imposible" que se pierdan, pese a que resulta muy difícil mover estos depósitos.

Nuevo sistema

Este es, en todo caso, el capítulo más llamativo del nuevo método de recogida de basuras implantado en el casco urbano, pero no es la única novedad. La más destacada para los ciudadanos es el cambio de los tradicionales contenedores actuales por 360 nuevos depósitos, con más del doble de su capacidad (llegan a los 2.400 litros) y que se pueden abrir mediante un pedal. También es posible hacerlo manualmente.

Todo este material (los 360 nuevos recipientes y los dos camiones adquiridos expresamente para su vaciado) fue presentado de forma oficial ayer en su "centro de operaciones" provisional del recinto ferial. Desde ahí saldrán en la noche de hoy para su despliegue progresivo por el casco urbano.