La urbanización de los 126.000 metros cuadrados del parque residencial de Valdecorvos para permitir la construcción de unas 500 viviendas protegidas costará 6,4 millones de euros y las obras se prolongarán más de dos años, según consta en el proyecto que la Consellería de Vivenda, que acaba de ser entregado al concello para su estudio. Este documento, elaborado por el arquitecto Julio Roberes de Cominges, iba a ser presentado públicamente por la propia conselleira, Teresa Táboas, el pasado miércoles, pero fue suspendido a última horas por "problemas de agenda".

El proyecto de urbanización establece el reparto concreto de viales, zonas verdes, equipamientos y, sobre todo, solares edificables para ese medio millar de viviendas. En concreto, se crearán diez de estas áreas, con 12.300 metros cuadrados para bloques compactos (a modo de torres), otros 8.800 para "bloques lineales" y 5.700 metros cuadrados para viviendas unifamiliares adosadas. Además de los futuros pisos, Valdecorvos ya alberga en la actualidad varios edificios, que ocupan 13.500 metros cuadrados más, con lo que el espacio ocupado por viviendas suma más de 40.000 metros, un tercio de toda la superficie del polígono, situado entre el barrio de A Seca y la avenida de Lugo. Estas obras, que obligarán a mover más de 170.000 metros cúbicos de tierra, están exentos de Evaluación Ambiental Integrada, aunque la Consellería de Medio Ambiente sí ha establecido algunas cautelas en la conservación de una plantación de camelias, la protección del arroyo de Valdecorvos y la defensa de una masa arbórea entre el barrio de la avenida de Lugo.

Colegio y guardería

Al margen del suelo edificable, el documento elaborado por la consellería destina doce mil metros cuadrados para equipamientos públicos (especialmente un colegio y una guardería) y otros 30.000 para la red viaria, aceras, aparcamientos y servicios asociados. El resto del espacio disponible (unos 45.000 metros cuadrados) se cataloga como zonas verdes y libres. El Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) ya empleó unos 14 millones de euros en la operación para expropiar los terrenos, que se suman a los casi siete necesarios para urbanizar la zona. El Ministerio de Vivienda aporta 1,4 millones, comprometidos hace un año. Una vez que se acometan esos trabajos podrá comenzar la construcción de las viviendas. Sin embargo, al respecto todavía no está decidido si será directamente la Xunta la que actúa de promotora o se subastarán o adjudicarán los solares a promotores privados, con la obligación de vender los pisos a los inscritos en el registro único de demandantes de viviendas protegidas. Sí está claro, en todo caso, que los 502 pisos (458 en bloques y 44 chalés) tendrán algún tipo de protección, ya que la Xunta ha declarado el proyecto como "una actuación protegida prioritaria".

Las comunicaciones de este futuro barrio con el resto de la ciudad se articula alrededor de un vial central de 22 metros de ancho, con acceso a la avenida de Lugo mediante dos ramales y una rotonda. La red secundaria se conectará con esa calle principal. Esta conexión se ejecutará durante las obras de urbanización, pero también se prevé un segundo enlace viario, cuya construcción no forma parte del plan inicial, que conectará el futuro barrio con la calle José Malvar.

Parque de Valdecorvos

Según el IGVS, a los 45.000 metros cuadrados de espacios ajardinados previstos en este proyecto se deberá añadir el denominado "parque de Valdecorvos" lo que permitirá disponer de 90.000 metros libres. "Al mismo tiempo, habrá 26.500 metros cuadrados de jardines privados vinculados a las viviendas, lo que supone el 21% del ámbito total".

La Xunta destaca la "especial atención" en la protección de las especies arbóreas de valor botánico de la zona, sobre todo camelias, dentro de una finca singular, con un pazo y otras dependencias, que se conservará. Por su parte, se crearán, según la Xunta, 1.385 plazas de aparcamiento, mientras que el concello recibiría la cesión gratuita de casi siete mil metros cuadrados más, el 10% del aprovechamiento de uso lucrativo.