Los geriátricos ourensanos fueron foco de preocupación tras la aparición del virus entre sus paredes y el ataque de una pandemia a un grupo de edad vulnerable según los datos acumulados de las autoridad sanitarias. El barrido del Servicio Gallego de Salud (Sergas) tomó muestras de 4.891 residentes y de 2.654 trabajadores de las 97 residencias de la provincia y de las 31 viviendas comunitarias. Un método para conocer el grado de profundización del virus en los geriátricos que permitió -y permite- afrontar el virus con más datos actualizados y reales para poner al frente recursos materiales y humanos con el fin de salvaguardar la vida de las personas afectadas.
Los resultados en las 128 residencias y viviendas comunitarias existentes en la provincia, muestran que el 95,2% de los residentes y el 2.8% de los trabajadores y trabajadoras de estos centros son negativos a la infección por coronavirus.
En total se recogieron muestras para la realización de PCR, para determinar el contagio de l virus a todos los residentes -4.891- y a todas las personas que trabajan en ellas -2.654-.
Una labor que fue realizada por el personal de los once equipos de recogida de muestras de Ourense, Verín y Valdeorras, que trabajaron en jornadas de mañana y tarde, todos los días de la semana, para recorrer las residencias y viviendas comunitarias, públicas y privadas, de la provincia y conseguir finalizar, el "mayor cribado" que se realizó en nuestra comunidad, en menos de veinte días.
Con los resultados obtenidos del barrido, se determina que un total de 120 residencias y viviendas comunitarias resultaron libres de contagios. "Muy lejos de los niveles de impacto de otras comunidades o países, pese la que estos centros presentan un elevado riesgo derivado de la convivencia, en un espacio cerrado, de numerosas personas de edad avanzada o dependientes, muchas veces con salud frágil y pluripatologías crónicas", según afirman autoridades sanitarias. Además, los equipos de recogida continúan a realizar muestreos, en aquellas residencias o viviendas en los que se detectó algún positivo.
Las autoridades sanitarias describen como "uno de los puntos críticos" la aparición masiva de positivos a finales del mes de marzo e inicio del mes de abril, provocado por "un derivado alto número de población acogida y por carecer, muchos de estos centros, de personal sanitario y facultativo propio. Fuentes sanitarias también describen que la Unidad del Hospital de Piñor y la Residencia Integrada de Os Milagros supusieron una "rápida respuesta" a la evolución de la pandemia en la provincia y que continúan funcionando. Desde el Sergas señalan que "los centros de salud, los Puntos de Atención Continuada y las Unidades de Hospitalización a Domicilio continúan a supervisar la asistencia en centro sociosanitarios y las residencias de la tercera edad de la provincia para hacer un seguimiento continuado de la situación y de las necesidades asistenciales".
Actualmente, las residencias afectadas se reducen siendo un total de once geriátricos ourensanos y de dos centros de discapacidad. Nuestra Señora de la Esperanza sigue con 30 positivos, la Residencia José Hermanitas tiene 31 y Divino Maestro 25. Los centros Galisénior, Nuestra Señora de Fátima, Riós y San Carlos se ven afectadas pero en menor medida con menos de 10 afectados.