Unións Agrarias solicita a las consellerías de Medio Rural y de Economía que cualquier ayuda pública de liquidez para las bodegas se vincule al compromiso de garantizar el precio y los contratos de aprovisionamiento en la próxima vendimia.

El confinamiento por el Covid-19 provocó una fuerte falta de liquidez en las bodegas, sobre todo las pequeñas, por la caída de ventas en la restauración, lo que "puede provocar un efecto arrastre sobre la base de los productores que verán como tendrán que dejar producción sin recoger y la que sea vendimiada tendrá unas cotizaciones mínimas".

UUAA solicita abrir una mesa de trabajo en la que se impulse la contractualización de la compraventa de uvas de forma eficaz, "que evite la especulación bajista que practican determinadas empresa". Piden líneas de crédito adaptadas a mantener el modelo social que tiene la viticultura en O Ribeiro, condonando cotizaciones fiscales a las explotaciones que no puedan sacar producción, así como directrices claras en el control de excedentes y tratamiento de añadas para regular el mercado. En la D.O. Ribeiro hay más de 1.500 explotaciones que aún entregan uva y la última vendimia fue de casi 12 millones de kilos.