Una avería en la catenaria en Vilamartín de Valdeorras registrada a la 8.00 horas de ayer obligó a parar a un tren procedente de Barcelona con más de 140 pasajeros y trasladarlos en autobús a sus destinos en A Coruña y Vigo. El tren se encontraba en una zona complicada para que los viajeros pudiesen bajar, ya que la avería se produjo en un túnel, por lo que tardaron varias horas en evacuarlos. Pasadas las 12.00 horas once pasajeros permanecían todavía en el convoy.

Esta situación provocó retrasos en otros servicios, con al menos seis trenes afectados, según informó Renfe. Este problema persistirá ya que se ha explicado que la reparación de la avería tardará varios días.