La marea que clama "Verín non se pecha" contra el cierre del paritorio y las urgencias pediátricas en el hospital comarcal se plantó ayer a las puertas del Parlamento de Galicia para hacer oír su grito en la sala de sesiones en la que se debatían y aprobaban los presupuestos de la Xunta para 2020. "Feijóo escoita, Verín está en loita", repitieron una y otra vez los más de 500 manifestantes plantados frente al Pazo do Hórreo mientras los grupos políticos debatían sobre el proyecto económico y la oposición recriminaba al presidente Feijóo los recortes en política sanitaria.

Esta movilización es una más entre las muchas que han protagonizado y protagonizarán los trabajadores del hospital de Verín y vecinos de la comarca. El paritorio se cerró el pasado 1 de diciembre pero no han dejado de protestar cada día y de sumar apoyos. La posibilidad de reabrir el paritorio si se cubren las dos plazas de pediatra que se han vuelto a convocar tras quedar desiertas en junio no ha calmado los ánimos pues, advierten, "mientras no lo veamos abierto, seguiremos".

En respuesta a esta movilización, el presidente Alberto Núñez Feijóo, se mostró ayer más flexible que al inicio del conflicto cuando afirmaba que no había solución al cierre. Ahora insiste en que "no hay inconveniente" para reabrir el paritorio, siempre y cuando haya pediatras. "Si los vecinos quieren usar el paritorio desde el punto de vista de sus decisiones personales, nosotros no tenemos inconveniente en que lo hagan bajo su responsabilidad. Pero hay que garantizar la seguridad de los bebés y eso pasa por encontrar pediatras", indicó. "Seguro que todos los que quieren el paritorio lo quieren completo con ginecólogos y matronas, que ya hay, pero también con pediatras, que hay que contratar", añadió. En cuanto esto suceda, insistió Feijóo, se reactivará el paritorio.

Con todo, la protesta de ayer partió de la comisión delegada del hospital de Verín y por la plataforma SOS Sanidade Pública de Monterrei, y contó con el apoyo de líderes y portavoces de los grupos políticos de la oposición. Desde la comarca de Monterrei llegaron a Santiago nueve autobuses, dos con salida de A Mezquita y siete desde Verín, cargados de manifestantes y pancartas con mensajes alusivos a los recortes en la sanidad pública, el desmantelamiento de los hospitales comarcales y la desaparición de servicios en el rural.

El secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, salió de la sesión parlamentaria para unirse y afirmar que "no hay ninguna razón técnica ni presupuestaria para cerrar un paritorio en una área tan relevante". La parlamentaria del BNG, Noa Presas, destacó la importante movilización social contra el cierre y reclamó una rectificación "inmediata". Asimismo, la portavoz nacional, Ana Pontón, avanzó que el BNG pedirá una investigación sobre las circunstancias en las que se desarrolló el último parto en Verín con traslado del bebé a Ourense al entender que "estamos ante un caso muy grave y no podemos normalizar una violencia ejercida desde el sistema contra las mujeres".

Eva Solla, de Común da Esquerda, afirmó que este cierre "va en contra de los derechos de las mujeres y los niños". Asimismo, desde Ciudadanos se han comprometido a mantener abierto el paritorio de Verín si esta formación llega a la Xunta.

Protesta en Valdeorras

De forma simultánea, la plataforma sanitaria de Valdeorras se movilizó frente al hospital comarcal en solidaridad con los manifestantes de Verín y contra una medida que, temen, acabe afectando también a este centro sanitario.