"¿Quién quiere dedicarse al mundo de la política dentro de 25 años?", preguntó el vicepresidente segundo de la Diputación de Ourense, Armando Ojea, a los 70 participantes de 11 años del pleno provincial infantil de Amencer, que tuvo lugar ayer. Unas manos tímidas se levantaron, mientras las risas y un "no" profundo sonó en el salón de plenos del ente provincial.

Armando Ojea dio la bienvenida y recibió de manos de la asociación infantil una camiseta, un diploma y una foto en la que uno de los monitores pidió "dientes". El vicepresidente segundo de la Diputación, de DO, explicó que "é algo bo que os máis pequenos coñezan o interior dos edificios institucionais, pero tamén é interesante adentrarse nos hospitais ou outros edificios para saber o seu funcionamiento e estructura".

El juego de la democracia empezó con nueve grupos políticos que debían proponer dos días conmemorativos. El monitor avisó: "Dos reales, no pidamos que vayamos todos a Estados Unidos porque no va a ser posible". Los "oh" fueron efímeros y el ruido se las sillas formó corrillos para tratar de acordar el asunto. El día del reciclaje, de la dependencia, de la televisión, el día de los animales o incluso una reivindicación económica :"Día de que no nos roben nuestros impuestos".

El parque acuático

Álvaro estaba sentado en la silla principal del salón de plenos del Concello de Ourense. Ante la advertencia irónica de un monitor, el joven no se encontraba cómodo. No era capaz de sentarse totalmente, hasta que el alcalde le saludó. Ahí ya se tranquilizó.

Pérez Jácome y Ana Morenza saludaron a los casi 70 niños de 10 años que encontraban sitio más allá de las sillas para escuchar el discurso. El regidor ourensano quiso escuchar iniciativas. La primera fue el arreglo del skate park de Os Remedios. La votación fue favorable a la renovación. La segunda fue la construcción de un aquapark. La votación fue unánime, excepto por el voto "díscolo" de un niño cuya intención era la de "llevar la contraria".

Doble sesión de plenos infantiles en Concello y Diputación que acercaron a los más pequeños a la política. Un mundo que ven, pero donde no se ven.