"Espero que al final las cosas vayan a su cauce y todo quede en nada. El problema es que ya se ha logrado algo, que yo esté apartado de un procedimiento, y una erosión personal. Es muy fácil erosionar la figura del juez y del fiscal. Cualquier sombra de duda nos afecta muchísimo y es una losa muy pesada. Es nuestra profesión y nuestra devoción y dependemos de la confianza de los ciudadanos". El fiscal jefe de Ourense, Florentino Delgado, ofreció ayer una entrevista radiofónica para salir al paso del expediente abierto por la fiscal general del Estado por seis supuestas faltas, cuatro muy graves, por su gestión de la causa del 10% contra el exalcalde Manuel Cabezas, y por las quejas de dos abogados de la exedil Áurea Soto en relación a un expediente sobre una letrada. El fiscal jefe provincial se defiende y califica como "radicalmente falso" que haya actuado contra los intereses de la exconcejala de Urbanismo, de quien recuerda que no la acusó en su última causa, la de la licencia de la residencia universitaria (salió absuelta), al considerar que era "inocente". "Ni conozco a Áurea Soto, ni tengo enemistad manifiesta con Áurea Soto, que es la esencia de lo que se me achaca, ni yo quiero perjudicar a Áurea Soto. Pero a Áurea Soto no le gusta lo que yo hago, lo que resuelve la Fiscalía, lo que resolvió el juez decano, contra el que se querelló, ni el presidente de la Audiencia, al que ha recusado por segunda vez. Ese es el problema, a partir de ahí es donde sale todo".

Florentino Delgado fue entrevistado ayer en Onda Cero Ourense. Considera que, pese al daño que ya se ha causado, la apertura del expediente -también se pone bajo el foco de la Fiscalía General al fiscal superior de Galicia, Fernando Suanzes, por una supuesta inacción ante las quejas de los letrados- supone una oportunidad para dar su versión. "Yo no creo en las casualidades", introdujo ayer, pero cree que el proceso le permitirá exponer sus argumentos. "Es ahora cuando yo puedo defenderme y hacer alegaciones, porque hasta ahora he sido un mero espectador de lo que decía Áurea Soto y sus representaciones legales. Ahora podré hablar y defenderme", reiteró en la radio.

Delgado llamó la atención sobre el hecho de que Soto se hubiera querellado contra el juez inicial del 10%, Leonardo Álvarez, quien en su momento dictó el archivo. El magistrado salió absuelto pero tuvo que declarar en calidad de investigado en el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG). Como resultado de aquella denuncia, el caso pasó a manos de su sustituta legal, la jueza Eva Armesto.

"Áurea Soto se querella por un delito de prevaricación contra el juez de instrucción por acordar un archivo que no le gusta. Logró que saliera del procedimiento, eligió juez. Además planteó quejas contra el presidente de la Audiencia y va por la segunda recusación. Cuando no le gusta algo hace lo que sea para ahormar su deseo a la situación judicial. Parece que el único que quedaba era yo", declaró ayer el fiscal jefe.