Cinco jóvenes varones acusados de robar el móvil a otro en Verín, en mayo de 2016, fueron juzgados ayer en Ourense. Dos de ellos se enfrentan a 3 años de prisión -frente a los 2 que el fiscal solicita para el resto- porque causaron fracturas a la víctima con dos puñetazos, cuando el perjudicado dio alcance al grupo y preguntó por su teléfono.

Sobre las 6.15 horas de la madrugada del 20 de mayo de 2016, cuando la víctima se encontraba sentado en el alféizar de una tienda situada frente a una discoteca de la calle Valle Inclán. El joven estaba manipulando su móvil. Según el relato de hechos de la acusación del fiscal, uno de ellos se dirigió al perjudicado en concierto con los otros y se lo arrebató de las manos. A continuación se dio a la fuga en dirección a la calle Bedoya.

El perjudicado los siguió y les dio alcance a unos 300 metros del lugar en que se produjo la sustracción. Al preguntar por su teléfono móvil, valorado en 72 euros, la víctima recibió supuestamente un primer puñetazo de uno de los encausados y otro posteriormente de un segundo implicado. El joven sufrió una fractura en la zona malar izquierda. Estuvo 5 días ingresado.

Según el escrito del ministerio público, después uno de los acusados rompió y tiró el teléfono, presuntamente. El dueño lo recuperó pero el terminal se encontraba totalmente inservible. El Sergas acreditó unos gastos de asistencia al lesionado por casi 780 euros. La Fiscalía quiere que los dos presuntos agresores del grupo de 5 acusados indemnicen en esa cuantía al Sergas y en 2.040 euros a la víctima.